Miguel Pereda:"Ya tenemos ofertas para celebrar la Gala del año que viene"

Cuando leas o escuches la entrevista que el CEO de Michelín para España y Portugal, Miguel Pereda, nos concedió justo antes de la Gala de las Estrellas de este año, igual ya conoces cuales son los nuevos “estrellados” porque te lo habremos contado nosotros en alguno de los canales de Los Platos Hablan.

En este conversación con Miguel, hablamos de los secretos que rodean a una ceremonia de estas características. Y más que de los secretos del trabajo que supone organizar un evento así del que esta atento todo el país.

Este año la ciudad elegida ha sido Toledo. ¿Por qué te estarás preguntando? Son muchos los criterios que se tienen en cuenta para llevar esta gala a una ciudad y no a otra. Algunos son meramente logísticos: buenas comunicaciones e infraestructuras hoteleras. Toledo esta estos días al 100% de ocupación. Otros son institucionales: el gobierno regional, la diputación y el ayuntamiento elegidos tienen que mostrar interés y colaborar en la preparación del evento. Pero también hay, y no podía ser de otra manera, criterios gastronómicos: interés por los cocineros de la zona, auge gastronómico de la tierra elegida, actividades gastronómicas a lo largo del año…

No es, en definitiva, el capricho de alguien que se levanta por la mañana y dice: la Gala se celebra aquí.

En este entrevista a Los Platos Hablan, Miguel Pereda reconoce que la guía ya tiene ofertas estudiando para el año que viene porque un evento así necesita de mucho tiempo de preparación. Además, desde que Pereda llegó a la dirección, la sede elegida para la celebración de esta se da a conocer antes. Toledo, sede de este años, se dio a conocer el pasado mes de marzo. La intención, si fuera posible, es incluso darla a conocer en enero o febrero. Y yo me juego un pincho de tortilla y una caña, a que llegará el año en el que la Gala del año siguiente se hará pública al final de la gala que se celebre en ese momento.

Ojalá nos toque pronto. Interés del gremio hay. Infraestructuras hoteleras, también. Solo falta el interés y la colaboración institucional. El año que viene, Año Lebaniego, sería una magnífica oportunidad.