Crisis en el transporte sanitario programado de Cantabria: aumentan las incidencias tras el colapso de la flota de la empresa concesionaria

El servicio de transporte sanitario programado en Cantabria vive momentos de gran incertidumbre. La empresa Diavida, concesionaria del servicio y responsable de garantizar el traslado de pacientes, se encuentra en una situación "muy delicada" tras las inundaciones en Valencia, que han dejado a la compañía con solo la mitad de su infraestructura operativa.  A esto se suma un aumento de incidencias en el servicio, agravado por un conflicto laboral debido al impago de salarios a sus 136 trabajadores, quienes han anunciado preavisos de huelga.

El consejero de Salud de Cantabria, César Pascual, ha confirmado que la Consejería es consciente de la compleja situación que atraviesa Diavida, señalando que la empresa ha comunicado sus dificultades, aunque todavía no ha presentado soluciones específicas para garantizar la estabilidad del servicio. Pascual ha explicado que, aunque su departamento está en estrecha comunicación con la compañía y los profesionales afectados, no permitirá que el estado actual se “consolide” de manera indefinida.

La empresa ya había recibido un expediente en tramitación debido a problemas en el transporte programado cuando asumió la gestión, y la situación de crisis generada por la DANA en Valencia ha vuelto a poner en jaque la operatividad del servicio en Cantabria. La Consejería, por su parte, ha manifestado que está evaluando alternativas y posibles medidas que aseguren la continuidad y calidad del transporte sanitario en la región.

Diavida enfrenta ahora la presión de ofrecer un plan concreto de recuperación y ajuste de recursos para responder a las crecientes necesidades de sus pacientes y a las exigencias de los profesionales sanitarios. Con un sistema de transporte sanitario en una situación crítica, la prioridad es restaurar la normalidad en el servicio para no poner en riesgo la salud de los usuarios de Cantabria.