Once detenidos por fraude piramidal mediante inversiones en criptomonedas y otros activos
Hay más de 160 perjudicados tras una operación desarrollada por la Agencia Tributaria y la Policía Nacional que ha descubierto un fraude de cinco millones de euros
Santander - Publicado el - Actualizado
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Funcionarios del Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y agentes de la Policía Nacional han desarticulado una organizacion criminal implicada en la ejecución de un delito continuado de estafa, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal. La red habria llevado a cabo una estafa masiva piramidal tipo "Ponzi" con epicentro en la localidad de Chiclana de la Frontera ( Cádiz) y ramificaciones en Cantabria y Alicante, mediante la presunta compraventa de criptomonedas, acciones y futuros.
Han sido detenidos 11 personas, cuatro responsables de la red, uno de ellos ha ingresado en prisión. Durante las investigaciones se ha tomado declaración a 164 perjudicados, a quienes la organización habría defraudado más de 5,1 millones de euros prometiendo altas rentabilidades desde la puesta en marcha de la estafa en 2018. Además se están analizando 44 cuentas bancarias relacionadas con las personas y empresas presuntamente implicadas.
Los investigadores tomaron declaración a un total de 164 afectados domiciliados en distintas ubicaciones del territorio nacional. Unas declaraciones que fueron sirvieron para después llevar a cabo la fase de explotación de la operación, donde se procedió a las once detenciones y a cuatro entradas y registros en domicilios y sedes sociales de empresas ubicados en Chiclana de la Frontera (Cádiz),Villafufre (Cantabria) y Elche (Alicante). Además, también se obtuvieron elementos probatorios mediante la incautación de diversa documentación, se está procediendo al análisis de movimientos bancarios de 44 cuentas bancarias abiertas por personas físicas y jurídicas de la red en un total de 16 entidades.
Funcionamiento de la organización
Los investigados, a pesar de que carecian de conocimientos del mercado de inversiones, pero aprovecharon la estructura comercial que tenían a su disposición en las oficinas de Chiclana de la Frontera y Elche para poner en marcha un plan que tenía como único objetivo obtener un beneficio ilícito a partir de una estafa masiva, convirtiendo algunos de los detenidos la estafa continuada en su ostentoso modus vivendi, incluso con el abandono del ejercicio de sus profesiones de origen. Los responsables de la organización llegaban a jactarse en redes sociales de su alto nivel de vida, que incluía la posesión de vehículos deportivos y de alta gama.
En el funcionamiento de las empresas creadas para desarrollar la estafa los investigadores detectaron dos escalones diferenciados. Por un lado, los líderes, encargados de llevar a cabo la administración de las sociedades, la elaboración de los contratos y la recogida y entrega de capital. En un nivel inferior, realizando labores de auxilio a los primeros, se encontraban los ‘conseguidores’, intermediarios que se beneficiaban por medio de la obtención de réditos en relación con los nuevos clientes que aportaban a la estructura piramidal.
Como resultado de la investigación, que no se ha dado por finalizada ante la posibilidad de localizar nuevos afectados, se ha podido descubrir que la organización criminal llevaba operando desde el año 2018