Los centros de pilates piden reabrir para "poder salvar al sector"
Aseguran que están dispuestos a "realizar medidas más estrictas de las que ya toman con tal de variar estas restricciones"
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Los centros de Pilates reclaman poder reabrir sus negocios en nivel III reforzado pues establecen que son instalaciones seguras y están dispuestos a tomar medidas más estrictas para poder retomar su actividad, pues están asumiendo gastos y no pueden generar ingresos en la actual situación.
En este sentido piden que se considere que son instructores de Pilates en sus propios estudios de Pilates, donde realizan una actividad en suelo o en máquinas que resulta muy beneficioso para la salud y resulta una actividad esencial para sus alumnos.
Así, estas empresas recuerdan que no son gimnasios ni instalaciones deportivas y su catalogación es de centros de Pilates, sin olvidar que como otros muchos negocios no pueden atender a sus clientes y por lo tanto comprometen su situación económica y su viabilidad.
Estos centros insisten en su slogan ‘Pilates es Salud’, siendo negocios seguros y que siguen los protocolos sanitarios correspondientes a esta pandemia como por ejemplo: uso de mascarilla obligatoria o tener más de dos metros de distancia entre usuarios o máquinas de Pilates, delimitando ese espacio por líneas o pantallas.
Además, disponen de máquinas y material higienizado y desinfectado antes y después de su uso, ventilación natural o sistemas de extracción de aire contaminado y entrada de aire limpio continuo, entre otras medidas
Con todas estas medidas afirman que siempre se han centrado en estos centros en la salud de sus clientes, socios, alumnos y usuarios, potenciando las medidas y equipamientos necesarios a tal fin.
Quieren recordar que este tipo de instalaciones están dirigidas a mejorar la salud de las personas, no son un aspecto de ocio, sino un sitio donde van a mejorar su estado físico y apostar por su salud. Remarcan que una gran mayoría de sus clientes o alumnos acuden a ellos por recomendación de un profesional sanitario, siendo por tanto una actividad esencial.
Reiteran que los estudios de Pilates no son centros deportivos, en ellos enseñan movimiento para mejorar y ayudar en la calidad física, mental y de salud de quien lo realiza, no tiene nada que ver con perder kilos o subir volumen o músculo.
Solicitud
Entre las solicitudes se señala que pueden reducirse el número de personas por clase de ahí que se puedan hacer entrenamientos personalizados reduciendo sus contactos.
Del mismo modo se apunta la obligatoriedad de mascarilla en toda la instalación y se exige que se aumente la distancia de seguridad mínimo a dos metros para evitar contagios.
Asimismo, están dispuestos a hacer un listado de clientes e informar a las autoridades para controlar los posibles contactos si hiciera falta. Ya que sus sesiones son realizadas bajo cita previa y no con un acceso público como lo es un gimnasio. Además, estos centros de Pilates tienen el derecho de admisión con todos sus usuarios.
Otra idea es pedir a los clientes una declaración responsable de PCR negativa o sin contacto positivo en las 72 horas previas a la cita que se vaya a realizar.