El municipio conquense que esconde una reliquia de la época de la Reconquista

Rodeado de unos enclaves y paisajes únicos, en plena falda sur de la Serranía de Cuenca, se encuentra la localidad de Carboneras de Guadazaón. Sus particulares calles en zig-zag y su riqueza natural convierte este municipio en un lugar perfecto para la desconexión, el senderismo, cicloturismo, espeleología y todo tipo de deportes al aire libre.

El emblema del municipio es la Santa Hijuela, la reliquia compañera de los Corporales de Daroca, vestigios de un milagro eucarístico (las formas consagradas sangraron) ocurrido en Luchente en el año 1239, cuando la Reconquista. La reliquia llegó a la localidad de la mano de los Marqueses de Moya hace siglos y los restos de dichos marqueses junto con la Santa Hijuela se veneran en la actual parroquia. Los pueblos vecinos acuden el segundo de mayo para honrar la reliquia en solemne procesión.

En Carboneras se puede visitar el Convento de Santa Cruz, del que sólo queda en pie la iglesia. Construido en 1500, este espacio fue antaño una Universidad regida por los Dominicos. De planta y arcada románica, la iglesia de Santo Domingo es, actualmente, el lugar de culto del pueblo.

Situada en la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha, la provincia de Cuenca cuenta con una extensión de 17.141 km2 y un total de 238 municipios. Un territorio que ofrece al visitante diferentes y hermosos paisajes.

Cuenca es el lugar ideal para disfrutar de la naturaleza en estado puro en todos y cada uno de sus rincones. En la provincia puedes descubrir parajes de extraordinaria belleza como el Parque Natural de la Serranía de Cuenca, conocer sus ríos, su fauna y flora. Pero Cuenca también es historia, patrimonio y gastronomía.

En Cuenca, por ejemplo, puedes aprender sobre los dinosaurios gracias a los descubrimientos que se han realizado en sus yacimientos paleontológicos o visitar sus yacimientos arqueológicos.

Su rica gastronomía es otro de los puntos fuertes de la provincia. Productos típicos, vinos o quesos que sorprenderán a cualquier visitante. A todo ello se suman sus celebraciones y tradiciones centenarias.

La Semana Santa de Cuenca está declarada de Interés Turístico Internacional y la capital es Patrimonio de la Humanidad.

Cuenca, un lugar inolvidable.