Consternación en el toledano pueblo de Pantoja tras la huida de un toro: "Hay un fallecido y varias cornadas"

Pantoja está consternado con lo ocurrido en uno de sus encierros, tradicionales en sus fiestas. Un toro rompía el vallado, escapaba y empezaba a cornear a quienes encontraba a su paso. Hay un fallecido por una cornada en el cuello, una persona de 74 años y tres heridos. 

El alcalde de Pantoja, Julián Torrejón contaba que “eran tres los heridos, entre ellos una niña pequeña de entre tres o cuatro años, los otros dos heridos son el abuelo y la abuela de la niña”. 

Heridos

“La niña tenía un golpe en el labio, la abuela tenía una cornada en el muslo que, según lo facultativo, no revista gravedad. Y el abuelo tenía una cornada en el abdomen”. El alcalde ha asegurado que no revisten gravedad pero tendremos que esperar unas horas para ver el alcance de las heridas. 

Todos consternados

La familia está como todo el pueblo, consternados. El alcalde ha informado que se van a “decretar dos días de luto y todos los actos están suspendidos. Luego esta tarde a las 17.00 horas me reuniré con el equipo de gobierno y con las asociaciones para ver qué hacemos”.

Vallado revisado

Minutos antes del festejo se ha comprobado y revisado el vallado. El alcalde nos comentaba que “junto al delegado gubernativo, está todo, cumple la normativa y está todo perfecto. En principio no hay nada que no cumpla”.

PASTOR

José Carlos, vecino del pueblo y además pastor que iba tras los toros. Nos ha explicado a los micrófonos de COPE Toledo que ha sido el toro quien “ha remetido contra el vallado, justamente donde estaba el camión de la salida de los toros. Posteriormente ha ocurrido la ruptura del vallado, ha embestido a un hombre desgraciadamente, de malas maneras”.

En ese momento el toro ha visto la calle, ha salido a la carrera y en la calle, según nos cuenta José Carlos “caso omiso el toro, mi compañero y yo dando voces 'toro, toro', porque la gente se alertara un poco de que había un toro escapado y, afortunadamente, no ha habido ningún herido en la calle ni nada, hasta que hemos podido parar el toro en el campo y ha sido abatido”.

“Es la verdad del toro, la cara y la cruz, pero estas cosas, pues oye, no se las espera uno y en el momento de la cogida, pues lo he visto todo. Gracias a Dios, porque el toro ha seguido de huida, por así decirlo, pero si el toro se queda ahí, con las personas, pues podría haber ocurrido otra desgracia”.