Altas capacidades: "No son niños raros, son niños con otras características que van a otro ritmo"

Es a partir de edades muy tempranas cuando los padres empiezan a ver alguna de estas características en la personalidad de sus hijos: aprendizaje rápido e intuitivo, gran creatividad, alta sensibilidad, mucha curiosidad o una edad mental bastante por encima de su madurez emocional. Son niños que tienen altas capacidades. En torno al diez por ciento de la población escolar las tiene.

En la provincia de Ávila oficialmente hay 52 niños con altas capacidades detectados. Una cifra que según OGMIOS Asacta, la Asociación de Altas Capacidades, Superdotación y Talento de Ávila, está por debajo de la realidad. Sin ir más lejos, esta asociación abulense, con tan solo ocho meses de vida, aglutina a 42 familias con hijos que tiene altas capacidades. Su presidente, Alejandro Olivar, que es además padre de dos niños adolescentes con altas capacidades, nos ha contado en COPE Ávila que el principal problema con el que se encuentran es “el gran desconocimiento y la falta de formación de los docentes”, así como todos “los estereotipos” que hay alrededor de estos niños, cuando el 70 por ciento llega al fracaso escolar.

Otro de los problemas a al que tienen que hacer frente es el acoso escolar, uno de cada dos niños con altas capacidades lo sufren en mayor o menor medida. Insiste Alejandro Olivar en que “no son niños raros, son niños con otras características y van a otro ritmo”.

Recuerda este padre de dos hijos con altas capacidades que el 10 por ciento de la población escolar las tiene, sin embargo es mucho más difícil de detectar en las chicas. Ellas mismas “se camuflan” y las esconden por miedo a la discriminación.

Desde la Asociación OGMIOS Asacta insisten en tres grandes necesidades que tienen las familias con hijos de altas capacidades. La primera, mayor formación en esta materia para los docentes y orientadores. La segunda más ayudas económicas, ya que estos niños requieren ayuda psicológica y muchas actividades extras para trabajar su motivación. Por último la asociación pide más facilidades a las administraciones públicas a la hora de reconocer evaluaciones privadas que vienen de centros acreditados.