Los negocios "de toda la vida" en Ávila no encuentran relevo generacional

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Disco 70, Textil Barcelona, Librería Senen, el Bar Porfi o el taller mecánico de Félix Jiménez, son negocios de esos de “toda la vida” de Ávila que conocemos desde niños. Muchos de ellos se remontan a tiempos de nuestros padres y abuelos. Algunos ya han echado el cierre por jubilación y no han tenido relevo generacional para continuar con el negocio familiar, otros están próximos a bajar la persiana definitivamente, pero siguen intentando encontrar una continuidad. Con los dueños o los descendientes de algunos de estos negocios hemos hablado hoy en Cope Ávila.

Es el caso del Bar Porfi, en la calle Soria, en el sur de la ciudad. Porfidio y mujer, Ofelia, han regentado el local durante 36 años, pero sus tapas míticas y riquísimas han dejado de servirse desde hace dos meses. Es el tiempo que “El Porfi” lleva cerrado por jubilación. Ninguno de los hijos del matrimonio ha querido seguir con el negocio familiar, a pesar de que siempre les han echado una mano. Ahora cada uno de ellos tiene su profesión. Porfidio, nos ha contado en Cope, que este cierre le ha costado muchas lágrimas.

Algo parecido le pasó a Félix, dueño del taller mecánico, Félix Jiménez, en la zona norte de la ciudad. Sus tres hijas han visto desde niñas el sacrificio de dirigir el negocio, y todas ellas buscaron “otra forma de vida”, optando por distintos trabajos, como ha relatado a Cope Sonsoles, una de las tres hermanas. Finalmente Félix encontró una continuidad para su negocio, alquilándolo a alguien ajeno a la familia.

Otro de esos negocios “de Ávila de toda la vida” es Textil Barcelona, en el centro de la ciudad. Santiago lleva más de cincuenta años al frente, y ahora próximo a la jubilación, todavía no tiene claro si su tienda podrá seguir dando servicio a los abulenses, pero está trabajando en ello.

Quien no recuerda en plena Plaza de Santa Teresa, en El Grande, la mítica tienda de Disco 70, donde igual encontrabas el último disco de tu cantante favorito, que un instrumento musical o una joya para el día de la madre. Desde febrero y tras más de 53 años abierto al público, Charo se vio obligada a cerrar su negocio por jubilación, con todo el dolor de su corazón, nos ha contado en Cope. Cada día Charo sigue echando de menos a su clientela de toda la vida.

La jubilación de sus dueños y la falta de relevo generacional, con hijos que han optado por otras profesiones viendo el sacrificio que estos negocios han supuesto para sus padres, son los principales motivos que llevan a su cierre definitivo tras décadas de servicio, clientela fija y seguro que muchas anécdotas que contar.