REPORTAJE

La médico abulense que “debutó” en plena crisis del covid

Alejandra Gómez tiene 26 años es médico, acaba de terminar el MIR y ha empezado a trabajar en un Hospital de campaña de Madrid, en plena crisis del Coronavirus.

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Alejandra Gómez tiene 26 años es médico y con su MIR recién aprobado en el bolsillo, estaba a la espera de que se publicaran las notas definitivas para elegir su especialidad y comenzar su andadura profesional. Pero la crisis del coronavirus se cruzó en su camino con una inesperada llamada de teléfono de la consejería de Sanidad de Madrid, el pasado 17 de marzo, solicitando su ayuda en un hotel medicalizado

Para Alejandra “la llamada fue como un jarro de agua fría, no habían llamado a ninguno de mis compañeros de carrera, fui la primera y al principio me quedé en shock. Después mi familia me apoyó y me animó a venir .”

Después del impacto de la llamada y junto a otros compañeros que se apuntaron también a la experiencia, esta joven médico abulense se encontró a la puerta de un Hospital abarrotado y desbordado en los primeros días de la crisis….”llegamos el día 19, en ese momento abarrotado de gente, bastante asustados, nos dieron la ropa, nos metieron en una habitación y nos explicaron lo que teníamos que hacer. Del Hospital salimos agobiados”

Todo ha sido nuevo en esta experiencia , desde los hoteles medicalizados hasta su denominación como R0 “lo han inventado porque no existía. No somos residentes. Estamos en el limbo”

Alejandra se enfrentaba por primera vez a la realidad de su profesión en un momento muy crítico, con muchas incertidumbres y sin la confianza que da la experiencia : “Tenemos, mejor dicho teníamos, cero experiencia clínica porque en la carrera más que hacer observas lo que hacen los residentes o los adjuntos. Tu estás como observador y teníamos miedo de que, en ese momento en que estaba todo tan caótico, nos encomendaran algo que no podíamos hacer”.

Los primeros miedos se disiparon cuando comenzaron a trabajar, siempre supervisados por residentes, en el hotel medicalizado. La situación estaba desbordada y veían como se iban llenando las plantas de enfermos hasta el punto de que, a los tres días, tuvieron que dejar sus propias habitaciones y trasladarse a otro hotel.

Alejandra solo tiene palabras de agradecimiento para todo el personal del ROOM MATE MARIO que está cuidando y atendiendo a los sanitarios allí alojados porque la situación no es fácil .. “hay días mejores y peores, estás cansado, terminas de trabajar en un turno de 12 horas y llegas a una habitación de hotel, maravillosa, pero no es una casa, estás lejos de tu familia”.

Pero a pesar de la dureza de la experiencia, Alejandra asegura que el trato con los pacientes ha sido lo más positivo“solo he encontrado buena gente, agradecidísimos por los cuidados. Es emocionantísimo cuando das el alta a una persona que has tratado durante semanas”.

Alejandra Gómez a sus 26 años está viviendo una experiencia que no olvidará y que le servirá sin duda en su futura carrera profesional aunque se inclina más por una especialidad quirúrgica que clínica.

Antes de despedirse quiere lanzar un mensaje de ánimo para todos los pacientes de COVID-19 , para los familiares de los fallecidos y para todos los que lo están pasando mal.