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¿Por qué el PSOE de Ávila y Arévalo Decide no apoyan al Rey ni la Constitución?
Los procuradores del PP consideran “cobardes” a los socialistas por “no sumarse a defender al Rey y a la Constitución”
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Los procuradores abulenses del PP en las Cortes de Castilla y León han lamentado el voto “rotundamente en contra del Partido Socialista, en palabras textuales de su portavoz, en el último Pleno de la Cámara regional a la Proposición No de Ley (PNL) de PP y Cs en la que se instaba al Gobierno central a proteger la Constitución como norma fundamental del Estado, defender la unidad de nuestra nación y la igualdad de derechos y deberes de los españoles, y defender y proteger la figura del jefe del Estado, el Rey Felipe VI”.
Miguel Ángel García Nieto, Vidal Galicia Jaramillo y David Beltrán han acusado a sus homólogos del PSOE de mantener una “actitud cobarde” y han mostrado su sorpresa por que “el Partido Socialista de Catilla y León y el de Ávila se nieguen a reivindicar su propio legado, su vocación democrática, a decir lo que sus afiliados y sus votantes les están pidiendo”.
Así, los parlamentarios autonómicos del PP de Ávila se han sentido “apenados, defraudados, indignados y decepcionados; pero exigentes, firmes y plenamente convencidos de que, desde el Partido Popular, seguiremos defendiendo los principios, los valores, los símbolos y las instituciones que nos unen y que han hecho que la concordia fuera posible en nuestro país. Es algo que queremos decirles a todos los abulenses”.
En la tensión vivida en la sesión plenaria de las Cortes la semana pasada, ha explicado García Nieto, “nos esperábamos cualquier cosa del maleducado líder comunista, pero no de nuestros compañeros socialistas”.
El procurador popular se ha preguntado si detrás de la actitud y el voto negativo, “increíble”, de los procuradores del PSOE a una iniciativa parlamentaria que “lo único que perseguía era pedirle al Gobierno de España que proteja la Constitución” había “complejos, miedo a expresar en público lo que piensan en privado, temor a incomodar a su jefe, seguidismo de los argumentarios que reciben desde Ferraz o, simplemente, sumisión para no se atreverse a defender lo que muchos socialistas de bien han defendido durante mucho tiempo: la Constitución y la Corona”.