El Ayuntamiento de Burgos sacará las cocheras municipales del entramado urbano en una operación millonaria

El Ayuntamiento de Burgos sacará las cocheras del entramado urbano en una operación que podría rondar los diez millones de euros, según ha avanzado este viernes el concejal de Fomento, Daniel Garabito.

Garabito ha explicado, en declaraciones recogidas por Europa Press, que la actual ubicación de las cocheras municipales, en la carretera de Poza, adolece de la calificación urbanística necesaria para poder afrontar las inversiones que requieren las instalaciones, por lo que una sesión extraordinaria del Consejo de Fomento ha valorado qué hacer con este emplazamiento.

Ante esta disyuntiva, el edil ha señalado que existen dos opciones, la de mantener las cocheras en su ubicación, haciéndose cargo el Ayuntamiento de las cargas urbanísticas que pesan sobre el 38 por ciento de su aprovechamiento, o buscar una nueva alternativa fuera del entramado urbano, liberando el sector en el que se enclavan para la edificación de casi 400 viviendas, tal y como contempla el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).

En este sentido, Daniel Garabito ha destacado que el sentir de los grupos municipales pasa por liberar el espacio y trasladar las cocheras a un entorno industrial, alejado de viviendas y dotaciones como las que las circundan actualmente.

Con este planteamiento, ha explicado que la intención municipal pasa por enajenar la parcela sobre la que se ubican las cocheras por un importe que podría oscilar entre los ocho y diez millones de euros, invirtiendo esa cantidad en la construcción de las nuevas dependencias.

Para ello, ha remarcado la necesidad de condicionar la venta al tiempo que requiera el Ayuntamiento para trasladar las dependencias a una parcela municipal, que se buscará en las próximas semanas dentro del patrimonio consistorial.

Opciones

Aunque las opciones están abiertas, Daniel Garabito ha señalado que existe una parcela de titularidad municipal en el polígono de Villalonquéjar, donde se encuentra actualmente el depósito de vehículos, que reúne las características necesarias para construir las nuevas cocheras municipales.

Se trata de una parcela de 48.000 metros cuadrados, de los que entre 20.000 y 25.000 metros cuadrados podrían ser ocupados por los garajes, mientras que el resto se podría destinar a otros usos, entre ellos se barajaría la posibilidad de mantener el propio depósito municipal de vehículos.

En todo caso, el concejal de Fomento, que ha agradecido al resto de grupos municipales los consensos que se están alcanzando en este área, ha recalcado que la operación se tiene que realizar en un "periodo estable" urbanísticamente hablando para que la operación permita invertir en la nueva construcción el dinero obtenido por la venta de la parcela actual.

El Servicio Municipalizado de Accesibilidad, Movilidad y Transportes (Samyt) ha realizado una estimación de máximos de los requerimientos de la futura instalación, cuyo presupuesto económico rondaría los 8,5 millones de euros.

Daniel Garabito ha dicho que entiende que se trata de un caso de máximos, por lo que ahora habría que analizar pormenorizadamente todos los detalles de las reivindicaciones, con el propósito de avanzar en un proyecto que, al menos, pretende arrancar en la presente legislatura.