FAE solicita a la Agencia Tributaria la aplicación de una moratoria fiscal para las empresas burgalesas

La Confederación de Asociaciones Empresariales (FAE) ha trasladado a la Delegación de la Agencia Tributaria en Castilla y León su preocupación por la posible falta de liquidez de las empresas burgalesas, por lo que le ha solicitado la aplicación de una moratoria fiscal de ámbito estatal, según informaron hoy fuentes de la patronal burgalesa.

Concretamente, pidieron un aplazamiento de tres meses para la presentación de las declaraciones y autoliquidaciones tributarias, así como la puesta en funcionamiento de algún mecanismo para que el pago de estas cantidades aplazadas pueda realizarse de forma fraccionada durante los seis meses siguientes a dicho aplazamiento.

Esta medida, a juicio de FAE Burgos, podría contribuir a evitar que comenzaran a producirse impagos en el tejido empresarial burgalés, teniendo en cuenta por la difícil situación que atraviesan las empresas, como consecuencia del estado de alarma decretado con motivo de la pandemia del Covid-19.

En este sentido, el presidente de FAE, Miguel Ángel Benavente, se ha dirigido a la delegada especial de la Agencia Territorial en Castilla y León, Georgina de la Lastra, para explicarle que, entre otras muchas dificultades, “las empresas, al igual que el resto de la sociedad, están viviendo una situación dramática, producen sin poder dar salida a sus productos, no ingresan, están sufriendo la ruptura de la cadena de pago y tienen grandes dificultades para mantener el empleo y hacer frente a sus obligaciones tributarias”.

Del mismo modo, el responsable de la patronal burgalesa ha insistido a la Agencia Tributaria que, “en unas circunstancias como las actuales, entraña para las empresas una enorme dificultad el cumplimiento de obligaciones tributarias formales tales como la llevanza puntual de la contabilidad, el suministro inmediato de información al que están obligadas algunas empresas o la confección de autoliquidaciones o su presentación”.