La rehabilitación del edificio de la Policía Local de Burgos permitirá un ahorro del 70% de energía

El Ayuntamiento de Burgos quiere realizar una rehabilitación integral del edificio de la Policía Local y bomberos gracias a las ayudas del Programa de Impulso a la Rehabilitación de Edificios Públicos de entidades locales.

El concejal de urbanismo, Daniel Garabito, apunta que el edificio de la Policía Municipal y Bomberos "destacaba para mal" en todos los criterios de eficiencia energética. "Estaba el primer o segundo edificio más ineficiente del parque que tiene el Ayuntamiento y es un edificio de escala grande, por no decir enorme, con casi 20.000 metros construidos, que hacía que cualquier actuación que se quisiera hacer de manera integral necesariamente implicara una partida presupuestaria de un calado muy importante", afirma.

El deterioro ha provocado, entre otros problemas, goteras, daños en la impermeabilización y en la fachada y ahora se busca que sea ejemplo de sostenibilidad y eficiencia energética. Garabito, señala que gracias a estas ayudas han convocado un concurso de proyectos al que se presentaron cinco propuestas y de las cuales el jurado por unanimidad ha elegido la presentada por el estudio de arquitectura Emmepolis Novecento, elegida por "respetar los valores arquitectónicos del edificio". "Al jurado le pareció la más adecuada primero por ser una propuesta que está muy trabajada, por ser creíble y por cumplir todos los requisitos de las bases", apunta el concejal.

En concreto, el concejal destaca la fachada que proponen. "Le aísla completamente por el exterior, con nuevas ventanas, una capa y nuevas cubiertas y un forro de aislamiento térmico por todo el edificio. Respeta su imagen hasta el punto de que va a reproducir el despiece y las juntas que tienen ahora los paneles de hormigón, de tal manera que el gran cambio en el aspecto del edificio va a ser lo que los arquitectos denominamos la quinta fachada, la cubierta", añade.

El edificio contará con una nueva cubierta ajardinada que permitirá una protección respecto a las altas temperaturas, haciendo que el calor no traspase el edificio y plantea también la posibilidad de que se pueda reducir el consumo de energía en hasta un 90 por ciento. En principio, el proyecto con el que se presentan a la convocatoria de fondos europeos permitirá reducir el consumo de energía primaria no renovable en un 71,77% pero establecen una hoja de ruta hacia la rehabilitación integral y completa de este edificio que permitiría en una segunda fase otra serie de actuaciones que incidirían en una reducción adicional del 18,64% del consumo de energía hasta completar, cuando la rehabilitación quedara terminada, una reducción de su consumo de energía en un 90%. El plazo para acometer las obras con estos fondos europeos finaliza en 2026.