Datos mixtos en la Economía Mundial. Escucha a Juan Pablo García Valadés, asesor de inversiones de Renta 4
Madrid - Publicado el
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Juan Pablo García Valadés, asesor de inversiones de Renta 4 Banco, dedica unos minutos a Cope León para valorar cómo ha comenzado el segundo trimestre del año en los mercados financieros.
Valadés apunta que las Bolsas han iniciado el segundo trimestre con recortes moderados, en medio de una bajísima actividad, provocada tanto por la semi festividad de Semana Santa como por la ausencia de noticias relevantes. En la semana, el Dow Jones ha tenido una muy ligera subida, al revés que el S&P y el Eurostoxx que han caído un 0,1%, siendo peor el Nasdaq con un descenso semanal del 1%. Movimientos suaves que moderan un poco la euforia con la que terminó el primer trimestre pero que no son muy significativos.
La realidad es que, aunque los mercados nos han enviado múltiples mensajes en el primer trimestre de 2023 y aunque nos siguen enviando mensajes incluso en estos días semi festivos, no es fácil sacar conclusiones claras de esos mensajes, porque se prestan a interpretaciones diferentes. De los datos que se van publicando, se puede interpretar tanto una gradual desaceleración de la economía como una resistencia grande a entrar en la tan anunciada recesión. Son datos mixtos, en cierto modo ambiguos, y lo mismo pasa con el comportamiento de los mercados.
Si vemos, por ejemplo, los mercados de bonos han pasado de tipos de interés superiores al 5% en el bono del Tesoro, al 3,9%. Es decir, los bonos han pasado de descontar una reactivación de la economía a descontar aparentemente una recesión, pero no una contracción fuerte. Lo mismo pasa con los datos económicos. Esta semana se publicó que PMI norteamericano de manufacturas que remontó por tercer mes consecutivo al situarse en los 49,2 puntos desde los 47,3 anteriores, es decir, sigue por debajo de 50 indicando contracción, pero muestra que la actividad manufacturera de Estados Unidos contuvo su caída. También es de lectura incierta el informe de empleo americano de marzo publicado el viernes, cayendo la tasa de desempleo del 3,6% del febrero al 3,5%. Baja algo la fuerte creación de puestos de trabajo respecto de los primeros meses del año, pero tras una subida de tipos como la que hemos vivido y en medio de la crisis bancaria provocada por el Silicon Valley Bank, el número de puestos de trabajo creados en marzo, no está nada mal.
Respecto a en qué momento se encuentra ahora la economía, Juan Pablo señala que nos encontraríamos en la fase en la que las medidas monetarias empiezan a afectar a la economía real, y cree que esa fase ha empezado con la crisis de SVB y de Credit Suisse. En su opinión, el ajuste de la economía será en fases y de forma ordenada, aunque a largo plazo. Un poco, al estilo Japón, sin llegar a ese extremo.
Kristalina Georgieva, directora Gerente del FMI, anticipó el pasado miércoles en Washington, el mensaje que hará el Fondo la próxima semana en su reunión de primavera. Vino a decir que el crecimiento de la economía global será bajo durante varios años, cifrándolo en el 3% durante los próximos cinco años, frente al 3,8% de las dos últimas décadas. Será el crecimiento más bajo en treinta años, desde 1990, algo que el Fondo achaca al proteccionismo, sobre todo de China, a la desglobalización, a la fragmentación geopolítica, y a la caída del comercio internacional. Por su lado Jamie Dimon dice en la carta anual a los accionistas de JP Morgan, que se publicó el martes pasado, que la crisis bancaria no ha terminado y que sus repercusiones durarán varios años.
En Renta 4, coinciden en esos plazos. Justamente esa es la visión que han mantenido hace tiempo, la de una economía que crecerá por debajo del potencial durante bastante tiempo, que necesitará de asistencia financiera, pero bajo un modelo diferente al de barra libre y al de rescates generales, y que seguirá inmersa en una transformación disruptiva permanente. Una transformación que hace a la economía mucho más resistente a los tipos de interés altos de lo que lo ha sido en el pasado. Como han comentado en alguna otra ocasión, estamos presenciando una economía que se contrae y a la vez se transforma, con un ajuste diferente al de pasadas crisis, con una recuperación en forma de K, donde habrá empresas que salgan reforzadas y otras que no sobrevivan.