ATAQUES LOBO
Se disparan los ataques de lobo en Castilla y León un 47 % desde que se protegió a la especie
Más de 3.900 ataques de lobo se registraron en el 2024 en la Comunidad y supuso la pérdida de casi 6.000 cabezas de ganado

El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha presentado los datos de ataques de lobo en 2024
Valladolid - Publicado el - Actualizado
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Los ataques de lobo en Castilla y León siguen creciendo. En 2024 se registraron 3.973 ataques. Un 47 por ciento más que en 2021, año en el que se incluyó al cánido en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre). Una medida que supuso el fin de la gestión y control de ejemplares que venía realizando la Consejería de Medio Ambiente. Los casi 4.000 ataques de lobo en la Comunidad, supusieron que murieran casi 6.000 cabezas de ganado, lo que supone un incremento del 39 por ciento más que en 2021. Los datos han sido presentados este martes por el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, a las organizaciones profesionales agrarias de la Comunidad.
“Especialmente significativo es que el incremento de ataques y cabezas se registra especialmente al norte del río Duero, es decir, allí donde antes la Junta de Castillas y León gestionaba de forma pública responsable y técnica la especie. Los ataques ahí ahora son mucho mayores entonces pone de manifiesto la relación directa de causalidad entre la inclusión del lobo en el Lespre con el incremento de ataques y cabezas desmesurado en Castilla y León” argumenta Suárez Quiñones.
Suárez Quiñones ha insistido en recuperar la gestión del lobo en los territorios y aplaude que Europa esté dando pasos para reducir la protección del cánido que como reflejan los datos siguen haciendo daños a las explotaciones ganaderas. Por provincias, Ávila aglutina el 25 por ciento de las cabezas de ganado muertas, le siguen Zamora, y Segovia, e importante incremento en la provincia de Burgos. José Ángel Arranz, director General de Patrimonio Natural y Política Forestal, ha destacado que no hay todavía un modelo eficaz para defender la ganaría en Castilla y León, que se trata de un modelo de ganadería extensiva.
“Son nuestras vacas sueltas en grandes extensiones de terreno y no existe ni aquí ni en toda Europa sistemas eficaces y de ahí que nosotros tengamos que recurrir. Lo único eficaz es controlar determinadas manadas que están haciendo daños”, explica Arranz.
lAS OPAS, SOBRE LOS ATAQUES DE LOBO
Las cifras de ataques de lobo al ganado durante el 2024 “asustan”, asegura Donaciano Dujo, presidente de ASAJA en Castilla y León porque suponen 11 ataques al día y 16 animales muertos al día. Datos oficiales, los reales son todavía mayores, asegura Dujo. Unos datos alarmantes que suponen pérdidas económicas.
“Nadie quiere la erradicación del lobo, quiere lisa y llanamente el control y gestión del mismo para que no provoque daños masivos al sector ganadero. Se comprueba en los datos fehacientemente que en aquellas provincias al norte del Duero donde había un control y una gestión de lobo todavía han aumentado mucho más los ataques y las muertes como consecuencia de que no se pueda controlar”, decía Dujo.
Todas las organizaciones agrarias coinciden en que los ataques de lobo pueden suponer el cierre de explotaciones agrarias. Aurelio González, de la alianza UPA-COAG, dice que ya antes del 2021, año en el que se incluyó el lobo en el LESPRE, estaban creciendo las manada de lobos y ya era un problema. “Nos parece una irresponsabilidad, una vergüenza, por parte de el Ministerio de Transición Ecológica si no se cambia el estatus del lobo, porque aquí el que está en peligro de extinción son los ganaderos”, matiza González.
Desde la Unión de Campesinos de Castilla y León, Jesús Manuel González Palacín, cree que a quien hay que proteger es al ganadero.
“A estas alturas nadie cuestiona que no está en peligro lobo, no está en peligro de extinción. Aun así aceptamos protegerle, pero no sobreprotegerle, porque a estas alturas aquí hay que protegerse al ganadero y tenemos una población de ganaderos muy muy envejecida con este panorama el relevo generacional no se antoja muy atractivo”, explicaba Palacín.
AYUDAS DE LA JUNTA A LOS GANADEROS
Además, el consejero de Medio ambiente ha anunciado que harán una revisión de la orden de la junta sobre los daños para compensar a los ganaderos en 2023. El importe de las indemnizaciones abonadas en el año 2024 fue de 4,8 millones de euros y antes de que el lobo estuviera en el Lespre apenas llegaba al millón de euros. Suárez Quiñones echa en falta que en cambio, las ayudas por parte del Gobierno, apenas lleguen.
“Llegó el primer año tarde y este año ha llegado la mitad y por tanto el año anterior nada. En definitiva, el cumplimiento ha sido un cumplimiento de menos de la mitad de lo que se había comprometido y por tanto la compensación pivota en los presupuestos de Castilla y León fundamentalmente. Consecuencias sí que hay que ponerle manifiesto que el Gobierno no ha cumplido en absoluto con su compromiso de financiación a las Comunidades Autónomas”, explicaba Suárez Quiñones.