Palencia quiere reinventar su tesoro subterráneo

La Diputación de Palencia ha iniciado la licitación para la redacción del proyecto y la ejecución de obras de adecuación y mejora de la iluminación y sensorización de la Cueva de los Franceses, ubicada en Revilla de Pomar. Esta actuación está enmarcada dentro del Plan de Sostenibilidad Turística de la Montaña Palentina, financiado por la Unión Europea a través de NextGenerationEU.

El presupuesto base de la licitación asciende a 371.900 euros, sin incluir impuestos, y el plazo de ejecución previsto es de seis meses. Las empresas interesadas podrán presentar sus ofertas a través de la sede electrónica hasta el próximo 6 de noviembre a las 23:59 horas.

El principal objetivo de esta actuación es reemplazar el actual sistema de iluminación, que presenta deficiencias significativas. La nueva instalación utilizará luces monocolores blancas y frías, mejorando así la eficiencia energética y evitando el “mal verde” o lampenflora, un fenómeno que afecta a muchas cuevas turísticas debido a la iluminación artificial. Este problema genera un crecimiento no deseado de organismos fototróficos que afectan la calidad patrimonial y turística de la cueva.

Además, el proyecto contempla la instalación de un sistema de sensorización que permitirá el seguimiento de parámetros ambientales y meteorológicos en el exterior, datos fundamentales para la conservación de la cueva.

Enclavada en el corazón del Parque Natural de la Montaña Palentina, la Cueva de los Franceses es una de las joyas geológicas de la provincia de Palencia, y forma parte del Geoparque Mundial de Las Loras, declarado por la UNESCO. Este impresionante espacio subterráneo no solo es un atractivo turístico, sino que también es un lugar de gran importancia ecológica y científica. Sin embargo, la cueva enfrenta desafíos que ponen en riesgo su conservación y valor natural.

Historia y Descubrimiento

La Cueva de los Franceses fue descubierta en el siglo XIX, y su nombre se debe a la presencia de soldados franceses que se refugiaron en ella durante la Guerra de la Independencia Española. Desde entonces, ha fascinado a visitantes y científicos por sus formaciones geológicas singulares y su biodiversidad. La cavidad alberga estalactitas, estalagmitas y un complejo ecosistema que depende de la pureza del entorno.