De vía del tren a turismo familiar

La provincia nos deja innumerables caminos por recorrer y aprender de lo desconocido. Uno de ellos es la antigua ruta del tren que unía las localidades de Béjar y Hervás.

La vía se ha convertido en una vía verde de 21 kilómetros por la que nos encontramos los pueblos de Puerto Béjar o Baños de Montemayor. Esa ruta fue posible gracias a la colaboración entre el pueblo de Béjar y el Ayuntamiento. Sendas fáciles, para toda la familia y con un paisaje lleno de color durante estos meses de otoño. Maxi Sánchez del club de montañeros Sierra de Béjar explica a Cope que es una ruta sencilla, con poco desnivel y que se puede realizar en diferentes tramos. Uno de estos tramos es el que une las localidades de Puerto de Béjar con Baños.

El ferrocarril que comunicaba Astorga con Plasencia dejó de funcionar. Atrás quedaron las décadas en las que esas vías de hierro unieron pueblos. Ahora ese trazado se ha acondicionado en algunos de sus tramos y se les ha dado un nuevo uso, una vía verde para senderistas y ciclistas que pueden disfrutar de un recorrido histórico, incluso para subir en peregrinaje hacia Santiago de Compostela.

Por el camino, el visitante puede disfrutar de un camino entre castaños, arces, robles o avellanos, pasando por antiguas estaciones de tren acondicionadas, como las de Hervás, Puerto de Béjar o Béjar, y viajar en el tiempo con huellas de lo que fue su uso ferroviario, gracias a traviesas, raíles de hierro, semáforos para el paso de los vagones o mecanismos para los cambios de aguja.

Llamativo es el paso por los túneles que permitían salvar desniveles y uno de ellos llama la atención por su longitud, un metro por debajo de las montañas, con luz que se atenúa con el paso de las personas y que al final abre paso a la naturaleza.

Este tramo Béjar-Hervás tiene continuidad hacia el sur, hacia Casas del Monte -otro tramo de 13 kilómetros también acondicionado-, y hacia el norte, por tierras salmantinas y con la mirada puesta en el norte.

El último tren pasó por aquí en 1985 y ahora con esta segunda vida sirve para revitalizar el turismo y dar a conocer esta zona que une las provincias hermanas de Salamanca y Cáceres.