El obispo de Salamanca Monseñor José Luis Retana impondrá la ceniza en la catedral vieja

Es Miércoles de Ceniza: hoy comienza el tiempo litúrgico de la Cuaresma. Son cuarenta días en los que la Iglesia llama a los fieles a la conversión del corazón para prepararse a vivir los misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo, que se recuerdan durante la Semana Santa.

La parroquias de la Diócesis de Salamanca inician este camino cuaresmal con la misa de imposición de la ceniza, para ofrecer a los fieles la oportunidad de renovar su fe, recordando la frase: “Conviértete y cree en el Evangelio”.

EL RITO DE LA IMPOSICION DE LA CENIZA

El obispo de Salamanca, Mons. José Luis Retana, presidirá hoy la eucaristía en la Catedral Vieja a las 20:00 horas y a continuación se impondrá la ceniza.

Durante este ritual, el sacerdote traza una cruz con ceniza en la frente de los fieles, mientras pronuncia palabras como "Conviértete y cree en el Evangelio" o "Recuerda que polvo eres y en polvo te has de convertir". Este gesto simboliza la mortalidad humana y pretende invitar a la reflexión y la reconciliación con Dios. 

Un año más, la colecta de las celebraciones del Miércoles de Ceniza en las parroquias de la diócesis salmantinas se destinará al proyecto diocesano Ranquines, y a su centro de día para personas con problemas de salud mental y en riesgo de exclusión social.

Esa colecta se puede ingresar directamente en la cuenta de Cáritas diocesana de Salamanca: La Caixa ES59 2100 1263 2201 0051 5557, indicando en el concepto: “Proyecto Ranquines”. También se pueden realizar donativos a través del portal web de Cáritas diocesana de Salamanca https://www.caritasalamanca.org/colabora/donativos/, indicando en el apartado “finalidad”: Proyecto Ranquines.

Misa en rito Hispano mozárabe

Además, la Catedral Vieja de Salamanca acoge cada primer domingo de Cuaresma la misa según el rito hispano antiguo o mozárabe. Este acto se celebrará el próximo 9 de marzo. Una ceremonia que era la forma propia en la que los cristianos de la provincia romana de Hispania celebraban los oficios litúrgicos hasta el año 1080, e incluso después, durante la Reconquista. Un rito que cayó en desuso cuando el Papa Gregorio VII comenzó a introducir el rito romano a toda la cristiandad, aunque no desapareció del todo. La eucaristía será presidida por el canónigo, Casimiro Muñoz.