Celebrar el día de Navidad con una competición en bicicleta... pero sin poder dar pedales

Setenta y cuatro participantes y sus bicicletas sin cadenas se dan cita en una nueva edición de la Carrera del Pavo

Carrera del Pavo

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Una vez más, las calles más céntricas de la ciudad de Segovia se llenaban de vecinos y turistas que quisieron aplaudir a los 74 ciclistas que participaban en una prueba muy especial: la octogésimo cuarta Carrera del Pavo. Una competición ciclista en la que, ahí está lo curioso, no se puede dar pedales. Es una carrera de bicicletas sin cadena, que se desarrolla cada mañana del Día de Navidad

La salida se sitúa en la calle Teodosio el Grande, que los inscritos descienden en paralelo al Acueducto. Impulsados con su propio cuerpo, pasan junto a la parte central del monumento, testigo histórico de la prueba, atraviesan la plaza del Azoguejo y encaran el ascenso por la Calle Real. En algunas ediciones, como ha ocurrido en este 2019, la humedad en el pavimento constituye una dificultad añadida. Una vez que la inercia adquirida en la bajada se desvanece, toca tirar de riñones y brazos, consiguiendo avanzar moviendo el manillar de lado a lado.

En esta ocasión, cinco participantes lograban alcanzar la meta, ubicada en la plaza de Adolfo Suárez, entre la Subdelegación del Gobierno y el Seminario. Así pues, se dio paso a un desempate, en el que ya todos se lanzan a la vez y se tiene en cuenta el tiempo empleado. El máximo favorito, Julio Martín, sufrió una caída en esa tanda definitiva, lo que acabó con sus opciones de lograr el noveno triunfo particular y, por tanto, de alcanzar el récord de José Luis Mayo, que data de la década de los ochenta del pasado siglo.

Hugo Sanz le arrebataba ese trono, con su padre Rafael en la segunda posición e Iván Gómez, en la tercera. Entre las féminas, la primera plaza correspondió a Lucía Martín, hija del ganador de las últimas ediciones. Tradicionalmente, los premios de esta prueba tan peculiar los constituyen un pavo para el primer clasificado, un pato para el segundo y un pollo para el tercero. Entre los participantes, y como siempre respaldando la carrera, el exciclista segoviano Pedro Delgado, ganador de un tour de Francia y dos vueltas a España.