La parroquia de la Santísima Trinidad celebra la Catorcena
El ‘día grande’ tendrá lugar el domingo 1 de septiembre, cuando se celebre la fiesta principal de la Catorcena.
Segovia - Publicado el - Actualizado
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La parroquia de la Santísima Trinidad acoge este fin de semana la celebración de la Catorcena, tradicional fiesta Eucarística que tiene lugar en torno al primer fin de semana de septiembre. Teniendo en cuenta que esta parroquia está integrada en la UPA Centro, en la preparación de esta fiesta también se ha contado con miembros de sus parroquias: San Andrés, San Miguel, San Martín y San Esteban (aunque esta última no tiene culto).
Como resultado de este trabajo en equipo surge una programación que nace con una dimensión eminentemente espiritual, puesto que la Catorcena es una fiesta de exaltación de la Eucaristía. Con el volteo de campanas anunciando el inicio de la fiesta de la Catorcena dará comienzo una fiesta que se extenderá del viernes 30 de agosto hasta el martes 3 de septiembre. Todos los días, excepto el domingo, tendrá lugar la exposición del Santísimo Sacramento a las 19 horas y, a las 20 horas la Santísima Trinidad acogerá la celebración de la Eucaristía presidida por D. Andrés de la Calle, párroco y responsable de la UPA, dedicada cada día a una intención especial. Además, la Cofradía de la Minerva y Adoración Nocturna tendrán una participación especial en la exposición del Santísimo.
Esta Catorcena también tiene una dimensión cultural. Así, el propio viernes 30, tras la celebración eucarística, la historiadora Mercedes Sanz de Andrés ofrecerá la conferencia «La iglesia de la Trinidad en el barrio de los Caballeros». Además, el sábado 31, al finalizar la Eucaristía se podrá disfrutar de «Un concierto espiritual» a cargo del grupo Hidalgos. En esta ocasión, también se ha puesto la mirada en los adolescentes y jóvenes, que están invitados a participar de la Gymkhana que recorrerá los templos de la UPA Centro. Una propuesta que tendrá lugar el sábado 31 desde las 11 hasta las 12.30 horas con salida de la Plaza de la Trinidad.
El ‘día grande’ tendrá lugar el domingo 1 de septiembre, cuando se celebre la fiesta principal de la Catorcena. El día comenzará con el volteo de campanas como preludio de la Eucaristía que, presidida por Mons. César Franco, Obispo de Segovia, dará comienzo a las 11 horas.
En torno al mediodía saldrá la Procesión Eucarística acompañando al Santísimo Sacramento por las calles del centro, realizando una estación sacramental en el Convento del Corpus Christi. En esta ocasión, la Banda «El Cirineo» de la Feligresía de San Andrés será la encargada de poner el acompañamiento musical a la procesión.
Ya por la tarde, a las 18 horas, se celebrará un acto eucarístico con el rezo de vísperas y bendición del Santísimo. Será en estos cultos en los que participe la Venerable Congregación Sacerdotal de San Pedro Apóstol.
Don Andrés de la Calle, párroco de la Santísima Trinidad recuerda que lo principal de esta fiesta es «el culto a la Eucaristía, su celebración, adoración y procesión», y aprovecha para invitar «a todos los cristianos» de Segovia a esta fiesta de la Catorcena que tanta relevancia tiene en nuestra ciudad.
historia de la catorcena
Las crónicas sitúan el origen de esta celebración hacia 1410, cuando el sacristán de la entonces parroquia de San Facundo, ahogado por las deudas que arrastraba, robó una Hostia Consagrada y la vendió para ser profanada en la calle Malconsejo. Entonces, la Sagrada Forma fue arrojada a un caldero de aceite hirviendo pero, para sorpresa de los presentes y de forma milagrosa, primero quedó suspendida en el aire, y después salió volando, produciendo una abertura en el edificio, para acabar en la iglesia del Convento de la Santa Cruz. Allí estaba celebrando la Eucaristía un fraile dominico, quien la recogió y la guardó en el Sagrario. El lugar de este suceso fue el actual convento de las hermanas Clarisas del Corpus Christi, antigua Sinagoga Mayor.
Como desagravio, catorce de las parroquias con las que contaba la ciudad por aquel entonces acordaron celebrar un acto eucarístico que sirviera para hacer memoria de este milagroso suceso. Cada año, una parroquia se encargaría de preparar esta fiesta, alternándose entre las intra y las extramuros. A cada parroquia le correspondía preparar esta fiesta cada catorce años, de ahí el nombre de catorcena.
Desde este hecho han pasado ya 614 años. Muchas de las parroquias originales ya no existen, por lo que, ante las voces que abogaban por la desaparición de esta tradición, desde el Arciprestazgo de Segovia se planteó la posibilidad de que las nuevas parroquias acogieran las celebraciones de aquellas donde ya no hay templo o está desacralizado, como así se viene haciendo