Buzos de la Guardia Civil y unidades caninas rastrean pozos próximos al lugar de desaparición de Esther

Ya son 20 días sin saber nada de Esther López. Su desaparición ha movilizado un importante dispositivo liderado por la Guardia Civil. Todos los medios al alcance están peinando el terreno, el río Duero y los pozos próximos al lugar de la desaparición de la mujer de 35 años de la que nada se sabe desde el pasado 12 de enero.

Hoy son Agentes del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas los que escrutan cada pozo en busca de restos bilógicos de la desaparecida, mientras dos perros adiestrado en la búsqueda de indicios rastrean el río y las riberas.

Las investigaciones se centran en reconstuir los últimos movimientos de la mujer de 35 años. Uno de sus amigos asegura que la dejó en el entorno del cruce de La Maña, donde reside un segundo investigado y el camino que conduce la casa del único detenido, Ramón, 'El Manitas' quien continúa en libertad, con la obligación de comparecer a diario y no de abandonar la ciudad, a la espera de conocer qué aportan las pruebas recogidas tanto en su domicilio como en su coche. Fuentes próximas a la investigación explicaron a COPE que ambos incurrieron en contradicciones, “o no dicen toda la verdad u ocultan algo”.