Mañueco, dispuesto a formar un gobierno en solitario, advierte a Vox de que no renunciará a sus principios

Las elecciones del 13F dibujan un escenario incierto en Castilla y León. Un PP vencedor en los comicios autonómicos, pero con necesidad de alcanzar alianzas, acuerdos o pactos que permitan configurar un gobierno “fuerte eficaz y estable”, alejado de la espada de Damocles. Es la pretensión del presidente en funciones, Alfonso Fernández Mañueco, que hoy ha presidido en Valladolid la Junta Diretiva Autonómica del partido.

El PP de Castilla y León tiene el timón y no piensa soltarlo. Alfonso Fernández Mañueco, ha frenado en seco las aspiraciones de Vox, aunque deja abierta todas las posibilidades, con la convicción de que “cualquier hipótesis de gobierno se realizará desde la sede del PP de Castilla y León”. De este manera reafirma su autonomía ante la dirección nacional del partido.

Su apuesta sigue siendo un gobierno en solitario, aunque consciente de que la aritmética parlamentaria inclina la balanza hacia Vox, formación de derechas que con sus 13 procuradores permitiría al PP contar con 44 escaños, tres más de los que necesita para la mayoría absoluta. Esto supondría otro gobierno bicolor en Castilla y León.

En este proceso de diálogo que se abrirá “hasta la extenuación” con todas las fuerzas políticas, Fernández Mañueco se dirige directamente a los de Abascal y les advierte de que no dará un paso atrás en políticas de igualdad. “No hay líneas rojas, pero sí principios que son irrenunciables”. El punto de partida será el programa electoral del PP. Así que no habrá negociación posible para tocar por ejemplo la ley contra la vilolencia de género que es una de las condiciones que Vox ha anunciado que pondrá sobre la mesa en su intención de acceder al gobierno.

Se avecinan semanas de intenso diálogo con todo el arco parlamentario que quedará constituido el próximo 10 de marzo.

Tudanca sigue "en pie", pero tocado

Los socialistas también han reunido a su ejecutiva autonómica donde Luis Tudanca ha anunciado que se mantiene al frente del partido en la Comunidad. “He valorado dimitir”, no lo oculta, pero “sigue en pie”, aunque tocado por unos resultados que le han hecho perder al PSOE siete procuradores.

“Sigo en pie. Sigo adelante y voy a seguir como secretario regional del Partido Socialista de Castilla y León, liderando este proyecto político. No voy a fallar a la gente de esta tierra, no voy a fallar a quienes han confiado en nosotros en estas elecciones y no voy a fallar a mi partido”, sentenciaba el líder socialista.

Tudanca ha asegurado que los socialistas no regalarán el gobierno al PP, por lo que ha rechazado hablar de una posible abstención de los socialistas para hacer presidente de la Junta a Alfonso Fernández Mañueco, al tiempo que ha aclarado que si se debate sobre un posible cordón sanitario a Vox tendría que ser a nivel nacional y no únicamente en la Comunidad.

“Que nos digan en qué han cambiado en relación con su posición respecto a Vox y si quieren que hablamos de cordón sanitario hablamos, pero de cordón sanitario, no de regalarles un gobierno. Si quieren que hablemos de cordón sanitario, que rompan los acuerdos de gobierno en Palencia, en El Espinar, en Aranda de Duero, en Murcia... y que se comprometan en todas las instituciones a ponerles un cordón sanitario, porque eso sí, regalarles un gobierno, nunca”.

Está convencido Tudanca de que Fernández Mañueco terminará alcanzando un acuerdo con Vox y cree que el líder del PP está dispuesto a “entregarlo todo por mantener el poder”.