Preocupación e incertidumbre en el mercado de abastos de Valladolid por el impacto de la sequía en el campo

No se descarta acudir a la importación para atender a las alteraciones en el aprovisionamiento

Laura Ríos

Valladolid - Publicado el - Actualizado

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Del campo a la mesa. El camino no es sencillo y la sequía está complicando esa travesía porque muchas campañas se están dando por perdidas y algunas están finalizando antes de tiempo. La sequía, pero también las heladas están detrás de estas alteraciones que primero notan los productores y luego se constata en los mercados de abastos. Nos hemos acercado a Mercaolid para conocer cómo se está viviendo el impacto de la climatología y no hay duda en boca de su gerente, Javier Pastor: “hay una gran preocupación e incertidumbre” entre las empresas mayoristas.

“Estamos en presencia de campañas muy desequilibradas y con cierto grado de incertidumbre por la climatología”, apunta Pastos. Se producen “alternaciones en el aprovisionamiento, fluctuaciones muy importantes en los precios con problemas en producción”, señala.

Como ejemplos, apunta a la reducción “notable” de la producción de la patata temprana que llega del sur de España. “Es un ejemplo descriptivo”, ya que la producción por hectárea ha caído en 15.000 kilogramos por el fuerte impacto de la baja pluviometría.

Ha productos estrella afectados por ejemplo en la fruta temprana que se produce en Murcia (nectarina, albaricoque, melocotones). Afectado también el valle del Guadalquivir, sobre todo la fruta de hueso, y en La Rioja, la hortaliza. Las campañas han concluido antes de lo normal. ¿Crecerá la importación?

Las empresas de mayoristas no ocultan su preocupación ante la incertidumbre y ya advierten del desequilibrio en el comportamientos de la campaña con posibilidad de tener que acudir al producto de importación. De momento, solo la sandía y el melón llega importado de otros países, así como los productos exóticos, pero no se descarta que pueda ampliarse la lista. La pera, por ejemplo, que es un producto popular, acumula un déficit de aprovisionamiento nacional, de modo que llega importación belga en algunas cantidades.

Un producto estrella que tendría que estar incorporado en los mercados de abastos es la cereza, viene con retrasos importante y “si se agudizan las malas condiciones climatológica afectará a la producción y al precio”, concluye Javier Pastor.

La sequía se deja notar en los mercados y en el bolsillo del consumidor

Esta situación también se vive en pequeños mercados como el de Plaza España o el Campillo. Los comerciales por ahora aseguran que no va a haber muchos problemas con los productos, pero están empezando a tener problemas con la naranja. “Habrá que buscarla donde haya y en un principio vendrá portuguesa. Con la cereza también se está viendo menos producción por lo que será una temporada más corta y cara”. Pero algo que caracteriza a todos estos mercados es que “siempre buscamos el producto español”

Esta falta de productos también repercute en los precios. “Se nota que el precio está subiendo”, “la cosecha es mala y la sequía viene mal para todo”, “el cereal no sale porque no está lloviendo y hace que se siga encareciendo”, es la situación general de todos estos comerciantes, que además de ver su producto encarecido ven como merman las venta porque “se retraen más y llevan menos cantidad” por lo que su situación a final de mes se complica.

Por otro lado los clientes reconocen que miran los precios pero que tienen que comer. “Prefiero que se usen productos nacionales pero si no queda otra es lo hay” es la tónica general de los usuarios ante la inminente importación de productos extranjeros en el mercado español.