Los vecinos de este pueblo de Zamora que no podrán felicitar las fiestas a sus allegados
Se han quedado sin servicio de telefonía fija, móvil e internet. El Ayuntamiento cerrará al no poder prestar sus servicios con normalidad.
Zamora - Publicado el - Actualizado
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Llegan las fechas navideñas y los vecinos de San Vicente de la Cabeza no podrán, durante estos días, felicitar las fiestas a sus seres queridos ni recibir los parabienes de su entorno cercano. El motivo, la falta de acceso a teléfono e internet en esta zona de la provincia.
En los últimos días, Telefónica suprimía el servicio de telefonía que todavía funcionaba con el cobre. El problema es que la supuesta portabilidad se ha realizado por parte de esta empresa sin que hubiera una alternativa, dado que la fibra óptica todavía no ha llegado a esta localidad.
Es por ello que los vecinos se encuentran sin posibilidad de comunicarse, ni por teléfono fijo, ni tampoco a través de móvil, por ondas, ni por internet. Ante esto, el ayuntamiento ya ha anunciado que cerrará sus puertas y suprimirá sus servicios, dado que un ayuntamiento sin comunicaciones en el siglo XXI es un ayuntamiento sin herramientas.
El alcalde de San Vicente de la Cabeza, Fernando González, ha denunciado en COPE Zamora la situación esta mañana. Se ha desplazado hasta la capital zamorana para presentar las quejas de todo el pueblo. “Telefónica ha dejado de prestarnos el servicio, ha cortado la línea y no tenemos nada. Digo con pena que el ayuntamiento tiene que cerrar porque no podemos ofrecer servicios. Estoy muy cabreado. Estoy seguro que si esto pasa en Cataluña estaría Aliste ardiendo, pero como aquí no nos quejamos nos tratan como a los tontos del pueblo”, ha explicado el primer edil.
El alcalde ha estado acompañado por el presidente de la Diputación, Javier Faúndez, que reconocía que han puestos todas las facilidades posibles al operador para buscar una alternativa, pero de momento no hay respuesta. De esta forma, los vecinos de San Vicente de la Cabeza pasarán estas fiestas incomunicados, con lo que ello supone, a nivel laboral, social y también sanitario, ante cualquier imprevisto que pueda acontecer.