Un menor escapa de una residencia estudiantil y la Guardia Civil de Zamora lo encuentra deambulando entre Muga y Bermillo
Se cree que detrás de la fuga hay un caso de acoso escolar y los padres ya habrían interpuesto una denuncia para investigar el caso
Zamora - Publicado el
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Un menor de edad escapaba durante la tarde de ayer de la residencia de estudiantes de Muga de Sayago donde se encontraba, presuntamente motivado por un caso de acoso escolar. La patrulla de Bermillo de Sayago de la Guardia Civil, tras horas de búsqueda, lo localizó en una vía entre Bermillo y Muga, presentando un principio de hipotermia. Antes de ser encontrado, el joven había dejado sus pertenencias en el monte, presumiblemente para evitar ser rastreado por su móvil.
Según la información recabada, la familia del menor ha interpuesto una denuncia por el presunto acoso escolar que el joven sufría. Este episodio pone en evidencia las graves consecuencias del bullying y la urgente necesidad de actuar para prevenir situaciones similares.
la importancia de frenar el acoso escolar
El acoso escolar, lamentablemente, es una problemática extendida en muchos contextos educativos. Las estadísticas revelan que un número alarmante de estudiantes sufre violencia verbal, física o psicológica por parte de compañeros. Estas situaciones no solo afectan el bienestar emocional de los jóvenes, sino que pueden derivar en consecuencias graves, como aislamiento, depresión e incluso intentos de huida o autolesiones, como evidencia este caso.
La sensibilización sobre el bullying es fundamental para combatirlo de raíz. Esto implica no solo educar a los estudiantes sobre el respeto y la empatía, sino también capacitar a los profesores y a las familias para detectar señales de alerta. Cambios en el comportamiento, pérdida de interés por actividades escolares o el temor a asistir al centro educativo son algunos indicios que pueden señalar situaciones de acoso.
Además, es esencial fomentar espacios seguros de comunicación donde los jóvenes se sientan apoyados para expresar sus problemas. Los centros educativos deben establecer protocolos claros y efectivos para la prevención y el manejo de estas situaciones. La intervención temprana puede marcar la diferencia en la vida de los afectados.
El caso de este menor en Muga de Sayago nos recuerda que el bullying no es un problema menor ni aislado. Es un fenómeno que requiere la colaboración de toda la sociedad para ser erradicado. Sensibilizar sobre su impacto y actuar con firmeza son pasos cruciales para garantizar que los jóvenes crezcan en entornos donde se sientan respetados y seguros.