El padre de Kira, que se suicidó con 15 años, reúne 70.000 firmas por un protocolo nacional contra el bullying
Kira sufrió bullying durante años e incluso post mortem, pero el colegio nunca hizo nada al respecto
Madrid - Publicado el - Actualizado
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José Manuel López, padre de la adolescente Kira López, que se suicidó hace un año, cuando tenía 15, ha recogido casi 70.000 firmas en menos de 24 horas a través de la plataforma ciudadana 'Change.org' para pedir al Ministerio de Educación un protocolo nacional contra el acoso escolar o 'bullying'.
En declaraciones en una entrevista a Cope Catalunya i Andorra, confiesa que no tenía mucha esperanza en recibir tanto apoyo al respecto, "sé que el problema del bullying es una lacra social que afecta casi a todos, pero no se habla porque es un tema tabú".
En España, cerca del 17% de los alumnos de 15 años ha sufrido acoso escolar, según recoge el Informe PISA 2018, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Asimismo, según el último informe presentado por Mutua Madrileña y Fundación ANAR, más de 1 de cada 10 estudiantes españoles fue víctima de acoso el pasado año, y en 2020 61 menores se quitaron la vida en el país.
José Manuel explica que el caso de Kira es especialmente crítico, pues siendo solo una niña, con 4 o 5 años, sufría bullying físico muy grave, y además le han hecho ciberbullying post mortem, "ha sido la única chica en España que después de morir le han enviado un mensaje al mail del colegio diciendo: muere, muerte".
Hace un año desde que Kira se quitó la vida, y los Mossos d'Esquadra siguen investigando. Su padre cuenta que hace menos de tres meses se llevaron también el portátil, -el móvil se lo llevaron al principio del caso-, en el cual confiesa que vieron cómo "el día antes de morir miró la forma más segura de suicidarse sin fallar".
José Manuel ha hablado con el Ministerio y ha pedido medidas urgentes, pidiendo que se elabore una ley explícita del acoso escolar, "hay leyes para acoso laboral en el trabajo... pero, ¿A nuestros niños no los protegemos?". Asimismo, apunta que legalmente no se puede defender a los menores porque solo el acoso físico y verbal es delito "pero no las miradas, el dejar de lado...".
Acusa también el poco control que se hace sobre el asunto en los colegios, "pueden hacer lo quieran, eso es así", y que los centros educativos deberían reaccionar. "El problema es que si lo hacen menores de 14 años, que no son imputables, el cargo máximo es una nota de fiscalía al centro, y sigue siendo el responsable del centro el que debe hacer que la cosa funcione".
Denuncia que l'Escola Pare Manyanet de Sant Andreu, el instituto al que iba su hija Kira, no hiciese nunca nada para detener el bullying que sufría, y que, incluso hoy en día, el centro niegue que lo padeciera. Además, "hoy todavía el colegio no ha denunciado ni el mail post mortem, ni las amenazas que recibió Kira después de morir". De igual manera, denuncia también el "bullying docente", el maltrato que sufría Kira por parte de sus propios profesores.
A día de hoy, José Manuel confiesa que sigue medicado y tanto él como su mujer siguen intentando superarlo "nunca estás bien". Le da las gracias a toda la gente que les apoya y está concienciada con el tema, y a la Generalitat, Ayuntamiento de Barcelona y Ministerio, ya que "me dijo que no me preocupara que lo iban a trabajar, y así es".
Cualquiera que sufra acoso escolar o sea testigo de un caso puede dirigirse al teléfono de ayuda 900 018 018 del Ministerio. El servicio es gratuito, anónimo, confidencial, está operativo las 24 horas, todos los días del año, para toda España y es atendido por psicólogos apoyados por trabajadores sociales y abogados. Existe también un chat, disponible también las 24 horas, gratuito y anónimo. Ambos son gestionados por la Fundación ANAR.