"No sabía dónde ir porque me echaron de casa y lo perdí todo": la historia de adicción de Jaume
Aumenta la edad media de personas con adicciones y se prevé que crezca más.
Barcelona - Publicado el - Actualizado
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Jaume, de 58 años, tardó tres en darse cuenta de que el consumo de alcohol y cocaína se había vuelto una necesidad y no en un hábito social. Esto le hizo perder el trabajo, las amistades e incluso le echaron de su casa. Cuando estaba tan perdido se dio cuenta de que necesitaba ayuda: "Vi que tenía que pedir ayuda. Es un paso importante y por eso vine a Proyecto Hombre".
Allí le dieron las herramientas necesarias para convivir con la enfermedad gracias al apoyo de profesionales. Después de 22 meses de terapia en Proyecto Hombre, Jaume puede decir que está rehabilitado y ya puede seguir con su vida normal, aunque él ya sabe que la enfermedad siempre estará presente: "Tenemos una bestia dentro que está dormida, porque la hemos conseguido dormir, aquí te enseñas a cómo hacerlo".
De lo que empezó a ser un consumo social con sus amigos, pasó a ser su peor enemigo. Tiempo y constancia han sido esenciales para la recuperación, lo que le ha permitido también recuperar la relación con su hija. Ahora tiene otro trabajo, pero aún tiene que hacer seguimiento con la fundación. Su vida ha vuelto a empezar.
Proyecto Hombre Catalunya alerta de que la media de edad de las personas atendidas por adicción se ha incrementado de los 37 años hasta los 44 en la última década y ha previsto que siga aumentando en los próximos años: "Es un reto para el sector", ha advertido la directora técnica de la entidad, Cristina Vidal.
Según el informe anual de la entidad, en 2022 la cocaína fue la sustancia más consumida en el 46,9% de los casos; seguida del alcohol, en un 38,4% de los casos; la heroína, en un 4,2%; el cánnabis, en un 3,7%; las adicciones comportamentales, en un 3,6%; las anfetaminas, en un 2,2%; y otras sustancias, en un 1%.