Los residuos de las aguas de Barcelona no engañan: aumenta el consumo de ketamina, cocaína y metanfetamina

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Claudio Vidal, director de Energy Control, en una entrevista en el informativo de Cadena Cope Cataluña

Redacción COPE Barcelona

Barcelona - Publicado el - Actualizado

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Barcelona lidera el consumo de ketamina, una sustancia anestésica, comercializada en Estados Unidos como antidepresivo, pero que también se usa como droga recreativa por sus efectos alucinógenos, y es la tercera en consumo de cannabis, según el último estudio del Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (EMCDDA). El propio organismo valora que el problema del consumo de drogas es, cada vez, "más extendido y complejo", y alerta del creciente consumo en Europa.

El Observatorio analizó las aguas residuales de 104 ciudades, de 21 países europeos, con el objetivo de encontrar el nivel de consumo de 6 sustancias- cocaína, cannabis, anfetamina, metanfetamina, MDMA y ketamina- en los residuos, y en todas las ciudades se ha detectado consumo en todas las sustancias.

En la ketamina, la cantidad detectada en Barcelona es 25,98 miligramos por cada 1.000 habitantes en día laborable, y de 32,06 en fin de semana, lo que supone una media diaria semanal de 29,45. La capital catalana es la tercera en consumo de cannabis, con 151 miligramos por cada 1.000 habitantes, por detrás de Ámsterdam y Ginebra.

Preocupación por el auge de la metanfetamina en todas las ciudades

Esta droga, protagonista de la exitosa serie de televisión Breaking Bad, tiene unos efectos devastadores en el cuerpo humano. Su consumo es muy adictivo, y el riesgo de provocar cuadros psicóticos es muy alto. Su consumo estaba más extendido en Europa, en la República Checa y Eslovaquia, pero este último estudio revela que su consumo ha acelerado en España, Bélgica, el este de Alemania, Chipre y el norte de Europa (como Dinamarca, Letonia, Lituania, Finlandia y Noruega). De las 60 ciudades que comparan datos de 2021 y 2022, casi dos tercios (39) notificaron un aumento de los residuos, en 15 ciudades hay una disminución y seis una situación estable. Los niveles de consumo son todavía bajos, en comparación con otras sustancias, pero los expertos en salud alertan de un crecimiento que preocupa, por las peligrosas consecuencias para los consumidores.

La cocaína sigue al alza

En más de la mitad de las ciudades, 38 sobre un total de 66 ciudades, su consumo ha aumentado. Desde el 2016 los datos son al alza con algunas fluctuaciones en el periodo del confinamiento. La ciudad belga de Àmberes, lidera el consumo con 2.400 miligramos diarios por cada 1.000 habitantes, la segunda ciudad ya es española; Tarragona ocupa esta inquietante posición con un consumo de 1.600 miligramos, y otra capital catalana como Lleida, es la sexta en consumo con 760 miligramos diarios por cada 1.000 habitantes.

Claudio Vidal, director de Energy Control, empresa de asesoramiento y análisis de sustancias, destaca en Cadena Cope que los resultados no son sorprendentes, porque el estudio de las aguas residuales," tiene que ver como monitorizar como son los consumos de droga, que habitualmente al basarse en encuestas tiene unas limitaciones. Este tipo de estudios, tienen datos objetivos que nos permiten una mayor mirada sobre el cuadro total del consumo", sostiene el experto.

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