¿Te acuerdas del Agua del Carmen? Recordamos la función de este remedio casero

Si eres de la generación que llegó a ingerir esta bebida como remedio de cualquier mal, seguro que recuerdas como las botellas del agua del carmen tenían su lugar en casa de la abuela.

El agua del carmen, aquí en España, nació en la órden de los carmelitas descalzos en Tarragona. Originalmente, esta bebida nació en la misma órden de los Carmelitas en Tierra Santa y su receta se desplazó por diferentes territorios, entre ellos, Grecia, Francia y España. Mercé Gras, historiadora del archivo de los carmelitas descalzos de Cataluña y Baleares, asegura que en París en el siglo XVII ya se comercializaba con este remedio.

El agua del Carmen está compuesta por agua, alcohol, flores frescas de Melisa, hojas de romero, hojas de menta, clavo de olor y piel de limón. Aunque principalmente en todas las órdenes el remedio se fabricaba con los mismo ingredientes, es cierto que depende el país o la órden en el que se realizaba podía tener alguna esencia diferente.

Uno de los elementos claves en esta bebida es la melisa por sus aceites y ácidos de las hojas que ayudan a relajar el sistema nervioso y aliviar mareos.

Este remedio compuesto por los carmelitas descalzos de Tarragona empezó a comercializarse por España para que la orden pudiera mantenerse económicamente.

Durante muchos años era raro no encontrar una casa en España que no tuviera una botella de esta bebida milagrosa. En tan solo “quince minutitos” el interior de la botella hacía efecto, o al menos así rezaba el tapón de esta.

Aunque hoy sería impensable proporcionar unas gotas de este remedio a niños, embarazadas o personas con problemas de alcohol antes era lo más habitual.

Si es de la generación que tuvo una botella de agua del carmen en casa seguro que recuerda la frase: “dale una cucharadita de agua del carmen, verás como pronto se le pasa”.

Seguro que después de recordar esta bebida se habrá preguntado ¿qué ha sido del agua del carmen? Es cierto, que ya no es tan habitual encontrar este remedio en casa de la abuela, pero si te ha entrado nostalgia, puedes acercarte a una farmacia a adquirir una de estas botellas o los caramelos del agua del carmen, que a diferencia de la bebida, no llevan alcohol.