El Palau Robert rescata la memoria de los pueblos sumergidos de Catalunya

El Palau Robert de Barcelona ha inaugurado en sus salas 1 y 2 la exposición ‘La Catalunya emergida. Descoberta del país que va quedar sota l'aigua’, una propuesta basada en el libro homónimo publicado en 2024 por Cossetània Edicions. La muestra podrá visitarse de forma gratuita hasta el 7 de septiembre. La exposición quiere dar a conocer un capítulo de la historia de Catalunya que, pese a ser reciente, permanece escondido bajo las aguas de embalses y pantanos.

Comisariada por Òscar Palau Just y Jesús Jordi Pinatella, con fotografías de Josep M. Montaner Fontarnau, la exposición recupera la memoria de aquellos territorios que fueron sacrificados para dar paso al progreso hidráulico. Un legado patrimonial y humano que resurge cada vez que la sequía extrema deja al descubierto campanarios, ruinas y caminos que durante décadas fueron borrados del paisaje.  

historia

Entre finales del siglo XIX y el año 2000, Catalunya vivió una transformación radical con la construcción de presas y embalses: desde la pionera presa del Pasteral, precursora del primer plan estatal de pantanos de 1902, hasta la más reciente, la de Rialb, inaugurada en el cambio de milenio. En este tiempo, decenas de pueblos, masías, iglesias, puentes, molinos y tierras de cultivo quedaron bajo el agua. Lo que para muchos fue símbolo de modernidad y abastecimiento, para otros supuso la pérdida de un modo de vida ancestral y la desaparición de su lugar de origen.

TRES BLOQUES

La exposición se divide en tres bloques temáticos que permiten entender el impacto territorial y humano de este fenómeno.

El primero, ‘Un cambio de paradigma en el Pirineo’, se centra en los pantanos noroccidentales como Sant Antoni, Terradets o Camarasa. Estas infraestructuras alteraron profundamente la vida de los habitantes del Pirineo, transformando su relación con la tierra, la economía local y la movilidad.

El segundo bloque, ‘Los depósitos de la metrópolis’, analiza los embalses que abastecen principalmente al área metropolitana de Barcelona y otras zonas industriales y urbanas. Aquí destacan Sau, Susqueda, la Baells o Darnius-Boadella.

Por último, ‘Secretos con historia en la Catalunya seca’ se adentra en embalses situados en zonas más áridas, como Guiamets, el Catllar, Siurana o Riudecanyes.

La exposición recoge historias de testimonios y descendientes de personas que habitaron, recorrieron o trabajaron en pueblos, 'masías', molinos, iglesias, caminos, puentes, donde hoy hay pantanos.  Se combinan mapas, explicaciones e imágenes "de gran valor histórico" así como otras de más actuales, tomadas mayoritariamente en 2023 durante la sequía que dejó los embalses en mínimos.