Vecinos de Barcelona denuncian irregularidades en la retirada del amianto: "Ponen en riesgo la vida de personas"
Acusan a la administración de actitud "criminal"

Miguel Moreno, miembro de la comisión contra el amianto de la FAVB
Barcelona - Publicado el
5 min lectura
Malas prácticas en la retirada del amianto en Barcelona. Es lo que denuncian los vecinos, la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB). La entidad considera que no sólo "es un desprecio hacia la salud pública" sino que "pone en riesgo la vida de personas". Por eso, le piden al gobierno municipal la creación de una figura específica para controlar estas intervenciones y que impulse un protocolo de urgencia para regularlas mientras no se aprueba la Ley del Amianto de Cataluña.
Ahora mismo, Barcelona tiene 25 planes de trabajo aprobados para sustituir tejados de fibrocemento y cinco más pendientes de evaluación, la mayoría en el Eixample. Según la FAVB se han detectado irregularidades en dos de las cinco actuaciones que ya se han iniciado en este distrito. Y avisan que no pararán hasta que las administraciones asuman su responsabilidad.
Joan Maria Soler, portavoz de la comisión contra el amianto de la FAVB, asegura que Barcelona y Cataluña se encuentran en "punto muerto" a la espera de que el proyecto de Ley para la Erradicación del Amianto en Cataluña se apruebe en el Parlament. Esta normativa regulará la forma en que se tiene que retirar este material y contemplará un régimen sancionador para las malas prácticas. Los vecinos sospechan que muchas empresas se están dando prisa para esquivar los nuevos controles que impondrá esta nueva ley.
Los vecinos afectados han comunicado al Ayuntamiento las incidencias detectadas, pero lamentan que la respuesta no haya sido todo lo contundente que esperaban. “Nos preocupa que mientras la nueva ley no está publicada pueda acelerarse la retirada de forma insegura por parte de muchas empresas”, ha comentado Josep Maria Soler, que insiste en la importancia de “vigilar y controlar todos estos procesos”.
En este sentido, le piden al Ayuntamiento de Barcelona un protocolo específico para el distrito del Eixample que incluya una inspección inmediata cuando empiecen las obras y, de forma sistemática, mecanismos de comunicación adecuados para que los vecinos sepan cómo se procederá en la retirada del amianto.
acusan a la administración de actitud "criminal"
Por su parte, Miguel Moreno, jubilado de Macosa – Alstom y miembro de la comisión contra el amianto de la FAVB, ha acusado la administración de tener una actitud “criminal” hacia la salud del vecindario porque no está asumiendo su responsabilidad para garantizar que se cumplan las medidas de seguridad pertinentes. Los vecinos se quejan de que no hay garantías de que en los procesos de retirada de fibrocemento no se desprendan fibras que pueden provocar enfermedades como el cáncer, la asbestosis o el mesotelioma. “Es un desprecio hacia la seguridad pública”, ha sentenciado.
Ponen como ejemplo algunas actuaciones como el uso de escobas para recoger el polvo del suelo. “Está totalmente prohibido usar escobas para hacerlo, se tienen que utilizar aspiradores industriales con un filtro determinado", ha indicado Moreno que ha señalado que "esto ya sería suficiente motivo para parar de forma automática una obra si un inspector la revisa”, ha comentado.
el distrito dEl eixample, el más afectado
Diversos vecinos ya han denunciado a Inspección de Trabajo varias irregularidades en obras para retirar amianto en diferentes puntos de la ciudad como el Poblenou o la Verneda. Pero el foco está puesto en el Eixample, donde sospechan que se concentra la gran mayoría de los 25 planes de trabajo autorizados.
Jaume Artigues, presidente de la Asociación de vecinos del Eixample, ha concretado que la mayoría de estas actuaciones no han arrancado porque todavía no se han autorizado las licencias de obras. Les constan cinco intervenciones que ya han empezado o que están a punto de hacerlo. “Dos han sido cubiertas ligeras que ya se han retirado rápidamente, otra corresponde a unos trabajos de revestimiento de una fachada que todavía no se han iniciado, y dos más ya se han hecho y se han hecho mal”, ha explicado Artigas.
Uno de estos casos corresponde a unos trabajos en un edificio de la calle Consell de Cent 425 que han generado mucha preocupación entre los vecinos. “Se dio la licencia en 2024 y se acordó que primero se tenía que retirar el amianto presente en los bajos y después se podía hacer la reforma del edificio, pero no ha sido así. Se ha hecho primero el derrumbe y parte ha caído sobre el tejado de fibrocemento, de forma que se han mezclado los materiales”.
Estos escombros ya se han recogido, pero alertan de que el proceso no se ha hecho con garantías y sospechan que se ha desprendido polvo de amianto y fibras.
El Ayuntamiento emplaza a los vecinos a una reunión, el próximo 22 de abril, para presentar los resultados de un informe sobre la calidad del aire en la zona donde se están llevando a cabo estos trabajos. Los vecinos recelan de este documento y, en paralelo, han pedido otro informe alternativo: “No sabemos qué días han hecho las mediciones necesarias para elaborar el informe, ni en qué condiciones se ha redactado”, dicen.
El Parlament sigue con la tramitación de la ley de erradicación del amianto
El Parlament ya ha celebrado el debate de totalidad del proyecto de ley de erradicación del amianto, que seguirá su tramitación parlamentaria después de que ningún grupo parlamentario haya presentado enmiendas de retorno.
El proyecto de ley impulsado por el Govern propone un nuevo marco jurídico para la eliminación "eficiente y segura" del amianto en edificios e instalaciones de Catalunya para evitar los efectos nocivos de este material en la salud de las personas y animales y en el medio ambiente.
Prevé facilitar la localización de las instalaciones que contienen amianto, y mejorar las condiciones de seguridad y garantizar la salud de las personas que lo retiran, así como medidas para atender a las personas con problemas de salud derivados a la exposición al amianto.

Parlament de Catalunya
Se creará un censo catalán de registro de estos materiales que se publicará en un portal informativo sobre el amianto, y creará un certificado de presencia o ausencia del mismo que se deberá proveer en compraventas o alquileres de inmuebles.
También se obligará a ciudadanos y administradores de fincas a informar de la presencia de amianto cuando tengan conocimiento de presencia de amianto en inmuebles, se creará un fondo para su retirada y un registro de empresas y profesionales que serán los únicos autorizados a tratar el material.
Según cifras del Govern, en Catalunya quedan 4 millones de toneladas de fibrocemento y entre 6.000 y 30.000 toneladas de proyectados y calorifugados, gran parte de ellas instaladas entre los años 60 y 80 del siglo pasado.
La Unión Europea recomienda de cara a 2028 la retirada completa del amianto de todos los edificios públicos y de cara a 2032 del resto de construcciones.