Un niño de 10 años gana las Olimpiadas Internacionales de Tecnología con un videojuego inspirado en su abuela: “Mis abuelos lo son todo”
El joven estudiante roceño destacó en su primer concurso internacional con su creación, que anima a ayudar a personas mayores, inspirada en su propia abuela
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Ser el primero entre 6.640 participantes de diez países no es nada fácil. Aunque tampoco es imposible si le pones empeño y sobre todo mucho cariño. Y esto es lo que ha conseguido Pablo, un chico de diez años que estudia en el colegio Cristo Rey de Las Rozas. Pero, ¿Qué ha ganado? Pues ha sido en unas olimpiadas Internacionales de Tecnología en las que han participado jóvenes de diez países. Allí ha presentado un videojuego que sirve para mucho más que jugar y pasar el tiempo. Invita a pensar y a tener conciencia de lo importante que es ayudar a los demás
La iniciativa, organizada por la Fundación NTT DATA, busca fomentar habilidades digitales y "soft skills" como la creatividad, el trabajo en equipo y la resolución de problemas. De este modo, la Fundación NTT DATA pretende acercar la tecnología a los más jóvenes, no solo como consumidores, sino como creadores y productores activos.
¿Cómo lo ha conseguido?
Pablo ha sido uno de los ganadores de la tercera edición de las Olimpiadas Internacionales de Tecnología gracias a la creación de un videojuego en la plataforma Scratch. Un juego inspirado por su abuela, quien es la protagonista del videojuego, Pablo diseñó un proyecto que incentiva a los usuarios a llevar una vida saludable y a ayudar a las personas mayores. Con el apoyo de su profesor de tecnología, este estudiante del Colegio Cristo Rey, en Las Rozas, participó por primera vez en un concurso de este tipo.
El videojuego de Pablo desafía a los jugadores a superar diferentes niveles y acumular puntos mientras realizan tareas que facilitan la vida de su abuela virtual, una representación cercana de la suya en la vida real. Durante la presentación ante el jurado, el joven compartió su motivación personal para desarrollar el juego y confesó que, aunque era su primera vez programando, el proceso le resultó emocionante y lleno de aprendizajes. "Mis abuelos son todo para mí. Me cuidan" comentó.
ayuda
Es una competición en la que solo puede haber un ganador, pero seguramente a todos los que han participado se les va a abrir una puerta en competencias tecnológicas, no solo en un futuro en el mercado laboral, sino algo más cotidiano, en el día a día de su propia familia.
El trabajo lo ha hecho él sólo, pero si que es verdad que ha tenido mucha ayuda y apoyo por parte de su profesor de tecnología y de su madre Marta, que ha sido la persona que le ha visto todos los días trabajando en el proyecto. "Para nosotros es un orgullo que nuestro hijo haya ganado esta competición, porque él solo se lo ha ganado y ha trabajado como el que más para conseguirlo", expresa Marta. Si que es verdad que hay personas que cuando tienen varias cosas que hacer se suelen centrar más en la que es más importante y dejar la otra de lado, pero como cuenta su madre, "Durante los más de 3 meses que estuvo con este súper proyecto, salía del colegio, hacía los deberes que tuviera que hacer y en el rato que le quedaba libre se ponía con el videojuego", por lo que sabía diferenciar una cosa de la otra y llegar a todo sin ningún problema.