Concluye la restauración de las canteras de Alpedrete, un proyecto no exento de polémica

Algunos vecinos critican el relleno de estas antiguas explotaciones mineras en desuso porque es tapar la historia del municipio, pero la Comunidad de Madrid defiende la actuación

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Fueron explotaciones mineras para la extracción de granito, una de las actividades económicas que sustentó a muchas familias antaño. Cuando el oficio cayó en desuso, el hueco que dejó en ese corazón de piedra que da nombre al municipio se llenó con agua de lluvia y muchos las han usado como su piscina natural particular, a pesar de que el baño está prohibido: primero porque es una práctica muy peligrosa y segundo porque son reservorios de fauna y flora, con algunas especies de anfibios muy amenazadas. Son las canteras de Alpedrete, que acaban de someterse a un proyecto de rehabilitación no exento de polémica.

Durante siete meses, en colaboración con el grupo de Restauración Geomorfológica de la Facultad de Ciencias Geológicas de la Universidad Complutense, la Comunidad de Madrid ha trabajado para recuperar el relieve y la biodiversidad autóctona en un espacio de gran valor ecológico.

En total, se han regenerado 22 frentes de canteras y nueve hectáreas forestales, se han conservado las láminas de agua en las canteras inundadas, se han adecuado espacios para los murciélagos, se han creado nuevos puntos de agua y berrocales para pequeños animales y se han retirado especies exóticas invasoras. Todo con el objetivo de devolver a la naturaleza este espacio.

"Esta es una experiencia única en Europa de cómo restaurar esas cicatrices que ha hecho la actividad humana en esa explotación de canteras respetando a la vez ese vestigio de actividad tradicional. Muchas de estas piedras forman parte de los principales monumentos de Madrid", ha apuntado el consejero de Medio Ambiente, Carlos Novillo, quien ha visitado las canteras en las que se ha actuado.

Antes de la restauración medioambiental se limpió el fondo de las canteras y se sacaron hasta diez contenedores con todo tipo de basura: neumáticos, botellas, electrodomésticos…

Los trabajos se han realizado en dos montes de gran valor, propiedad municipal e incluidos en el Espacio Protegido Red Natura 2000 Zona de Especial Conservación ZEC Cuenca del río Manzanares, así como en las zonas de transición de la Sierra de Guadarrama y la Reserva de la Biosfera de la Cuenca Alta de los ríos Manzanares, Lozoya y Guadarrama.

Estos terrenos singulares están cubiertos en gran parte por encinares y con alguna zona de pinar.

Los nuevos espacios se han puesto a disposición de los vecinos para usos tradicionales compatibles como la ganadería o el ocio.

En el ámbito científico se han mantenido frentes de explotación para permitir posteriores estudios sobre el origen de las rocas de muchas viviendas construidas en la zona.

Las obras han estado financiadas con fondos europeos Next Generation.

Polémica y recogida de firmas

La restauración ha generado cierta polémica, no todo el mundo ha visto con buenos ojos que se "rellenaran" algunas de las canteras y se ha abierto una campaña de recogida de firmas a través de Change.org en la que muchos vecinos muestran su preocupación por el "destrozo en la Dehesa".

Consideran que “es tapar parte de su historia e identidad... la memoria y el recuerdo de los padres y abuelos de muchos vecinos para los que la cantería fue su medio y forma de vida”.

La respuesta del consejero ha llegado en forma de invitación a los ciudadanos a comprobar el resultado. "Yo creo que, al contrario, esto lo que hace es abrir al mundo esa experiencia de esta localidad, que es única, poder dar a conocer la historia de la extracción del mineral en Alpedrete con itinerarios. Que todo el mundo esté tranquilo, que han estado los técnicos de la Consejería y de la Universidad detrás para hacerlo en las mejores condiciones y a los hechos me remito, sólo hay que ver la transformación", ha respondido Novillo.

Desde el Ayuntamiento recuerdan que se mantienen aquellas canteras que están incluidas en el Catálogo de Embalses y Humedales de la región.

El de Alpedrete no es el único emplazamiento minero en desuso en el que va a intervenir la Comunidad de Madrid en la Sierra de Guadarrama. También se ha anunciado la restauración de la Dehesa de la Golondrina en Navacerrada. Junto a la renovación de otros dos emplazamientos de similares características en Rivas y Aranjuez, suman una inversión de 1,6 millones de euros.