El Hércules sigue paralizado a un mes del inicio de la pretemporada

El Hércules sigue atascado a un mes del inicio de la pretemporada. El club apenas se ha movido a nivel oficial en los dos últimos meses. Sólo una lista de bajas, la llegada de Becerra y Varela y algunos cambios en el departamento de comunicación. Nada de ilusión después de la peor temporada de la historia de la entidad.

Carmelo del Pozo es consciente de que cada día que pasa sin firmar el contrato adquiere más fuerza sobre Ortiz, Ramírez y Portillo. Conoce de sobra la casa blanquiazul y no quiere sorpresas. Sabe de sobra que debe dejar atados todos los detalles económicos del nuevo proyecto para no tener que salir corriendo en mitad de la pretemporada.

El ERTE empieza a ser un arma de doble filo para la entidad. Una vía de ahorro para los accionistas, pero un problema para las nuevas contrataciones y el inicio de la pretemporada con normalidad. Los jugadores con contrato en vigor se sienten maltratados por el club y, aunque sean pocos, algunos se quedarán y hay que convencerlos para arrancar con fuerza la temporada en el mes de octubre.

El Hércules debería ir pensando en recobrar la normalidad, la inactividad le está matando. Más de cuatro meses sin fútbol, sin pasión y sin ilusión.