Despoblación
La solución temporal para salvar un servicio vital: un ayuntamiento de Castellón hará de farmacia
El consistorio de Portell de Morella, localidad de unos 160 habitantes, asumirá temporalmente este servicio para la ciudadanía tras el cierre de la farmacia.
Castellón - Publicado el - Actualizado
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El interior de la provincia sigue haciendo frente a un problema latente y en crecimiento. La despoblación en un gran número de localidades que acarrea además el cierre y desaparición de servicios vitales para su subsistencia. Uno de ellos lo ha vivido en sus propias carnes, y le ha tocado idear nuevas posibilidades para encontrar una solución a un gran problema.
Hablamos de Portell de Morella, con 160 habitantes, que ha visto como la farmacia del pueblo cerraba y ante ello, como nos ha explicado en COPE su alcalde, Álvaro Ferrer, "no nos queda otras que hacer de la necesidad virtud". Pese a que se ha realizado la solicitud para contar con un botiquín que dará este servicio 2 horas al día ("hay que cumplir requisitos, como son un sitio accesible, con salida a la calle y 30 metros cuadrados disponibles. Nosotros lo tenemos y lo solicitamos"), va a haber un espacio de tiempo sin poder dispensar medicamentos. Un limbo al que ya han encontrado solución el consistorio, tal como nos ha destacado Ferrer: "Nosotros nos quedamos el SIP de las personas interesadas, los llevamos a la farmacia de Cinctorres, nos sirven los medicamentos de manera personal y se reparte al día siguiente".
Doble objetivo
Álvaro Ferrer, alcalde de Portell, nos ha explicado cómo el ayuntamiento va a asumir ahora este servicio de manera temporal. Y todo ello con un doble objetivo: que los ciudadanos no noten la pérdida y eviten desplazamientos por intrincadas carreteras de montaña: "Es dar un servicio a aquellas personas que la necesitan. Y viendo como tenemos el tema de transportes, lo asumimos desde el ayuntamiento. Si tenemos alguna finalidad es la de dar servicio".
Más problemas ante la pérdida de población
Una solución que espera Ferrer sirva para seguir impulsando la llegada o al menos el mantenimiento de sus habitantes. De cara a ello, eso sí, esta población presenta otro problema: da trabajo a personas de otras poblaciones pero no las logra acoger como habitantes: "A mi me asusta una cosa en Portell, porque tenemos gente de fuera que viene aquí a trabajar. Me preocupa que viene mucha gente de fuera a trabajar pero perdemos habitantes. Habrá que ver el problema, estamos trabajando para resolver el problema de la vivienda. A ver de qué manera puede ser la solución por lo que vienen más de 10 personas a trabajar pero no alzamos el vuelo. A ver cómo podemos captar a la gente. Igual el problema es que la gente que viene es de pueblos cercanos".
En todo caso, el alcalde de la localidad de Els Ports ya anuncia que no se va a rendir, y aunque teme que llegará el día en que "cerrarán el pueblo, hasta entonces que nos cojan trabajando y peleando para no perder el hilo de esperanza y dar con la tecla para poder revertir esta situación que no es fácil. No es un romanticismo, quiere ser una realidad".