La cárcel de Albocàsser sufre graves inundaciones

El centro penitenciario de Castellón II sufrió grandes inundaciones debido a las fuertes lluvias caídas durante el pasado sábado, 2 de septiembre. En el departamento de comunicaciones interiores (locutorios), se filtraban grandes chorros de agua a través de las lámparas del techo. Además, se desprendió parte de dicho locutorio, afortunadamente sin lamentar heridos.

Otras zonas afectadas, el módulo 7 y 8, donde también se produjeron graves inundaciones, esta vez dentro de la cabina de los funcionarios. Ni el esfuerzo de achicar agua con cubos daba fruto, el agua entraba en tales cantidades que no se podía contrarrestar el problema expulsándola con cubos. La situación de los funcionarios del centro era peligrosa, al disponer la cabina de gran cantidad de dispositivos electrónicos, con el riesgo de electrocución que ello supone.

El trabajo de los funcionarios no resultó efectiva, el agua mojó todo el mobiliario, incluyendo la consola con la cual se controla la apertura y cierre de las puertas de las celdas de los internos, entre otras funciones, siendo peligroso en ese momento su utilización por el riesgo de quedar electrocutados, poniéndose en riesgo la seguridad tanto de los trabajadores como de los internos.

A causa de las graves carencias que desde hace tiempo está atravesando el centro penitenciario, la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (ACAIP) albocasser ha denunciado dichos desperfectos de las instalaciones y piden a la dirección que se pongan manos a la obra.

Esta vez han sido las lluvias las que han puesto en peligro al personal y a los internos, pero los problemas ya vienen con anterioridad, el sistema de refrigeración está estropeado, y para los trabajadores los días que atravesaron durante las olas de calor eran asfixiantes, siendo imposible estar en los despachos en las horas centrales del día.

Desde la ACAIP solicitan a la dirección que tomen medidas oportunas y empiecen a arreglar urgentemente todos los desperfectos ante el riesgo que supone para trabajadores e internos.