Castellón da un paso importante para contar con un nuevo ordenamiento urbanístico

El pleno de la capital ha aprobado por un lado la exposición al público de la nueva propuesta de Plan General Estructurado teniendo en cuenta el informe ambiental de la Generalitat que modifica algunas cuestiones y por el otro los cambios en el pormenorizado correspondientes a las más de 100 alegaciones aceptadas total o parcialmente.

Estos 2 puntos han salido adelante, en el primer caso con votos positivos de todos los partidos excepto el PP, mientras que el segundo ha sido con el apoyo de los que forman el Acord de Fadrell, la negativa de los populares y la abstención de Ciudadanos y Vox.

El debate, que ha alargado por algo más de una hora, ha mostrado el malestar de la oposición respecto a algunos puntos, y especialmente centrado en la pérdida de suelo industrial. Así, mientras Luciano Ferrer de Vox lamentaba que esta reducción traerá un encarecimiento del suelo que frenará la llegada de nuevas empresas; Alejandro Marín-Buck de Ciudadanos apuntaba que ha hecho falta un Plan General Estructurado más ambicioso y desde ahí trabajar en el pormenorizado, en lugar del actual que según ha denunciado presenta errores arquitectónicos incomprensibles.

La otra formación de la bancada frontal, el PP, ha puesto el foco en la falta de diálogo y consenso con el resto de formaciones políticas, y que “han agachado la cabeza ante Valencia”, en reflejo a la falta de propuestas ante la bajada de suelo industrial que ha conllevado la DATE. Además, su portavoz Sergio Toledo, ha apuntado que “este PGOU “no sólo no resuelve los actuales problemas de los castellonenses, sino que genera nuevos”.

La cara contraria la encontramos en los miembros del Acord de Fadrell, que han resaltado este documento como “esperado” y que supondrá la huella que dejará en la ciudad, por conseguir un “modelo de ciudad que queremos para Castelló”. Entre otros puntos han destacado, como ha hecho el portavoz de unides Podem Fernando Navarro, la recuperación para suelo rústico de una superficie que supone “160 Parques Ribalta”, mientras que el edil de Urbanismo José Luis López ha indicado que se han tenido en cuenta cuestiones como dar más espacio a los peatones frente a los vehículos privados, el control ante las casas de apuestas o la protección de la Marjalería, con la derogación del anterior plan pero el trabajo en nuevas medidas.

Y frente a todo ello, eso sí, el consenso no ha sido completo. Y es que tal como ha lamentado el síndic de Compromís, Ignasi Garcia, un cambio de última hora ha dejado sin el espacio reservado a lo que debe ser el futuro conservatorio y escuela de danza de la capital, que en principio estaba destinado a ubicarse frente a la Ciudad de la Justicia.

Un cambio que ha criticado la coalición nacionalista pero que abrirá a próximas negociaciones entre ambas formaciones. Garcia de momento ha recordado la necesidad de contar con esta infraestructura, que también liberaría espacio para la Escuela de Artes y Oficios.