El Ayuntamiento firma un convenio con Caixa Popular para luchar contra la pobreza energética

Ambas entidades han ratificado este viernes un convenio según el cual la Banca Cooperativa financia el reparto de cientos de cestas de fruta y verdura ecológica y de proximidad entre las familias participantes en el proyecto como agradecimiento por su colaboración e implicación en el estudio. Las cestas de frutas y verduras pertenecen a dos productoras agrarias locales, Camí de l’Horta y Les Marietes.

Según Carlos Mundina, “este convenio con Caixa Popular es un ejemplo de las políticas de colaboración público-privada que llevamos a cabo desde la corporación municipal en favor de una transición energética justa. Además de luchar contra la pobreza energética y estudiar su impacto entre la población vulnerable, ponemos en valor la alimentación sostenible y la salud en nuestros barrios.”

Por su parte, Paco Alós, director de Responsabilidad Social y Relaciones Institucionales de Caixa Popular, destaca “la importancia de la colaboración entre la administración pública, las empresas y la Universitat de València para ayudar a las personas que más lo necesitan y, en especial, en el ámbito de la vulnerabilidad energética“.

Caixa Popular, además de aportar 7.800 euros para la preparación y reparto de cestas, fomentará la inclusión de las familias en otras iniciativas y proyectos sociales patrocinadas por la caja cooperativa, muy activa en iniciativas de responsabilidad social. Hasta el momento, se han repartido más de 200 cestas a los participantes del proyecto y se espera al menos doblar esta cantidad antes de agosto de 2024, fecha final del programa piloto.

El proyecto WellBased, financiado por la Comisión Europea, tiene el objetivo de analizar y reducir el impacto que tiene la pobreza energética en la salud y bienestar de familias en situación de vulnerabilidad energética con el fin de diseñar e impulsar acciones y políticas públicas que garanticen el acceso y buen uso de la energía para toda la ciudadanía, independientemente de su situación socioeconómica. El proyecto, que cuenta con 7 pilotos en distintos países europeos, y en el que también colaboran entre otros la Universitat de València y el Hospital Clínico de València, está liderado y coordinado desde València a través del centro de innovación Las Naves y la Fundació València Clima i Energía.

Los participantes del proyecto, principalmente residentes de Poblats Marítims, Orriols, Benimaclet, Aiora y Algirós, colaboran en el estudio respondiendo a encuestas sobre salud y calidad de vida, facilitando la toma regular de medidas de salud (capacidad respiratoria, oxígeno en sangre, tensión arterial y calidad del sueño) y monitorización durante 18 meses de confort ambiental doméstico a través de sensores de temperatura, humedad y dióxido de carbono. Muchos de ellos disponen además de asesoramiento personalizado en materia energética a través de la Oficina de la Energía municipal para reducir sus consumos, optimizar sus facturas y acompañarles en la solicitud del Bono Social para aquellas familias que tengan derecho, además de recibir un kit de eficiencia energética.