Kangin se convierte en un doble problema

Kangin Lee sigue recluido en su país tras disputar los Juegos Olímpicos. Las restricciones por el COVID en Corea del Sur son muy estrictas y obligan a mantener cuarentena durante veinte días. Este motivo ha retrasado su incorporación al Valencia, a pesar que desde el club se trabaja para intentar agilizar los trámites para adelantar su regreso a España, cuestión que parece bastante complicada. Lo que es seguro es que no estará en el estreno liguero ante el Getafe en Mestalla y, todo ello, con su futuro más en el aire que nunca. Es sabido y contado en Deportes COPE Valencia desde la temporada pasada, que el jugador ha venido rechazando las ofertas de renovación que ha recibido. Termina contrato en junio de 2022, con lo que el club entiende que la voluntad firme del futbolista es la de no continuar y marcharse libre a partir del próximo mes de enero. Situación que molesta y mucho a los dirigentes que entienden que el centrocampista ha demostrado muy poco cariño por el club que le trajo a España y que le ha hecho crecer como jugador desde que se incorporó a las categorías inferiores de la Academia con tan sólo diez años.

Pero la situación no tiene vuelta atrás y así lo ha demostrado desde hace tiempo cada vez que las partes se han sentado a la mesa para hablar del futuro del coreano. Kangin reclama desde hace mucho, mayor protagonismo en el equipo, pero lo cierto es que no ha tenido continuidad con ningún entrenador que le ha dirigido en el primer equipo. Su rendimiento ha tenido más sombras que luces y sobre todo destaca por la irregularidad, apenas destellos de la mucha calidad que atesora en sus botas.

Bordalás también lo tiene claro. No quiere en su vestuario a nadie que no esté cien por cien convencido en sumar al proyecto. Sea con minutos o sin ellos. Con lo que el técnico alicantino aboga por dar salida al jugador. Situación complicada ya que el mango de la sartén lo tiene el jugador que apura su último año de contrato. Un caso parecido al de Ferrán Torres.

Por si fuera poco, Kangin se ha convertido en un doble problema para el mercado. Si no sale, y decide esperar a consumir su último año de contrato para quedar libre y negociar así con otro club un contrato al alza, crearía un tapón en el número de extracomunitarios para una posible llegada a la plantilla del equipo de Mestalla.

Maxi Gómez, Omar Alderete y el propio Kangin son los tres extracomunitarios a día de hoy. Se da la circunstancia de que en una de las operaciones que tiene en marcha el Valencia para posibles incorporaciones, es la de Marcos André, el delantero brasileño del Real Valladolid. A Bordalás le gusta, si los clubes salvan el escollo económico, se añadiría entonces, el problema del cupo ya que André tiene unicamente pasaporte brasileño, a pesar de haber llegado a España hace seis años. Su entorno trabaja en la doble nacionalidad, pero, en ningún caso llegaría a tiempo de inscribirse en este mercado estival. La información que manejamos en Deportes COPE Valencia al respecto es que los clubes han avanzado en la negociación y se habla incluso de una cantidad por el 50% de los derechos federativos del jugador para hacer más accesible la cantidad a pagar por el Valencia. Todo, como siempre, a expensas del OK definitivo de Peter Lim que el pasado viernes, por videoconferencia, se comprometió con Bordalás a intentar reforzar más su plantilla.Si el máximo accionista ofreciera el pulgar arriba, sería entonces cuando el Valencia se encontraría con el problema las plazas de extranjeros con loq que necesita, de manera paralela, dar salida a Kangin Lee. Mediocentro y delantero son las prioridades para el técnico alicantino a tres días de que arranque el campeonato liguero.