VALENCIA BASKET

Pedro Martínez: "Las expectativas del club no me dan miedo, son súper motivantes "

El técnico catalán se presenta con un mensaje cauto pero muy claro: buscar la mejor versión posible de cada uno y dar todos un paso adelante

Fermín Rodríguez

Valencia - Publicado el - Actualizado

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Con el aplauso de los aficionados que acudieron el jueves a la pista central de l'Alqueria del Basket a saludarle ha empezado el acto de presentación de Pedro Martínez como nuevo entrenador taronja, noticia desvelada por COPE el pasado sábado. Escoltado por Enric Carbonell, director general y Luis Arbalejo, director deportivo, el técnico catalán quiso desde el primer momento rebajar las expectativas que ha despertado su fichaje, sin renunciar a su innato carácter competitivo. También ha querido agradecer la puerta abierta para esta segunda etapa en el Valencia Basket. "Lo primero dar las gracias al club por esta fasntástica y súper motivante oportunidad. Vamos a ver cómo va todo. No es mi forma de ser vender cosas que no sé si van a suceder o no. Espero que hagamos un buen trabajo de equipo entre todos. Mi compromiso es ayudar a que las cosas vayan bien. Ahora mismo siento una gran responsabilidad sobre mis espaldas, con Juan Roig, Enric Carbonell y Luis Arbalejo, que son los valedores de que esté aquí y siento la responsabilidad de estar a la altura de la decisión profesional que han tomado. Necesito mucha ayuda para que seamos capaces de hacer las cosas bien, que hagamos un juego dinámico, que la gente se vea representada con los valores de esfuerzo que llevamos en la camiseta. Que seamos competitivos y estemos a la altura de lo que una entidad como Valencia Basket tiene como objetivo. No es una entidad que se conforme con poco y los que formamos parte de esta organización tenemos que estar preparados para ese paso adelante", apuntó el técnico en su primera intervención.

¿Pensaba que llegaría este día de volver a Valencia Basket

No soy partidario de hablar del pasado, ni siquiera del futuro, lo verdaremente importante es el presente. Paco Raga, entonces director general, cuando me comunicaron que no seguía ya me dijo que quién sabía si algún día volvería. En aquel momento se tomó la decisión que habíamos quedado que se iba a hacer. Después a mirar hacia adelante. Ahora se han dado las circunstancias para volver a estar juntos. Estoy, feliz, ilusionado, pero lo veo, ahora, como el reto más importante de mi carrera, porque es el siguiente. Sin despreciar a los anteriores. Me ha abrumado un poco la repercusión de mi fichaje, no me siento a gusto con eso. Quiero ayudar a que las cosas vayan lo mejor posible. Yo no meto canastas ni cojo rebotes, no soy decisivo ni marco las diferencias. Ayudar al club desde mi posición para que vaya bien, no soy el más importante del club.

¿Qué Valencia Basket le gustaría ver en su vuelta?

Es buena pregunta, porque una cosa es lo que te gustaría y otra lo que te dejan los rivales, porque hay que adaptarse. Lo que espero es que consigamos un grupo de jugadores con buena mentalidad, que quieran jugar en equipo, con buena química, porque Valencia Basket siempre tiene buenos jugadores. Lo importante es que tengan la mentalidad adecuada para ayudar al equipo a ser competitivo. Estoy convencido de que tendremos buen equipo y espero que hagamos un buen trabajo para que ese equipo se convierta en algo más. Ese es el reto, que los jugadores den su mejor versión. Todos queremos ganar, pero no todo es eso. Si hacemos un juego dinámico, de lucha, de entrega, la mayoría de nuestros aficionados van a estar contentos. Si falla eso, solo nos queda el resultado y eso no lo puedes controlar. Ahí es cuando se produce la decepción. En eso no podemos fallar.

¿Qué le ha gustado del Valencia Basket de las últimas semanas? ¿Hay algo que puega coger?

Me considero un entrenador muy corporativista y quiero agradecer el trabajo de Álex Mumbrú y Xavi Albert. Con este último se ha hecho un juego con el que me siento más identificado, de más ritmo y posesiones. Han hecho un magnífico trabajo que no se ha visto recompensado con los resultados.

¿Qué hay que hacer para que la plantilla de Valencia Basket juegue como a usted le gusta?

Lo entrenadores proponemos, pero luego los jugadores tienen que creer, trabajar y esforzarse para que una idea vaya en la dirección adecuada. Yo pongo mucho crédito a los jugadores que he entrenado en Manresa en las últimas temporadas por su fe en lo que les hemos propuesto. No tengo duda de que aquí va a ocurrir lo mismo. Pero vamos a trabajar, a conocernos, no les voy a pedir a los jugadores que no sean naturales. Para eso están las pretemporadas, para consensuar, para concecernos y ver cómo podemos ser más eficientes. Sí que reconozco que me gusta el baloncesto dinámico, defender duro, físico, pero eso me gusta a mí y a los diecisiete entrenadores de la ACB. Vamos ver si entre todos somos capaces de ser los mejores en lo que nos propongamos hacer.

¿Cómo podría solucionarse la irregularidad que ha mostrado el Valencia Basket en las últimas temporadas?

En primer lugar hay que poner en valor las dificultades que ha tenido el equipo. La Euroliga y la ACB son dos competiciones durísimas y hay ejemplos de esta misma temporada en los que se paga un peaje. Todos querríamos jugar siempre a nuestro mejor nivel, deberemos luchar para que no pase, pero es muy difícil en lo físico y en lo mental. No tengo la sensación de que vengo a un club en el que haya sido un desastre absoluto las últimas temporadas, los resultados podrían haber sido mejores, pero los otros equipos también juegan.

¿Tiene miedo a que la gente crea que sólo vale ganar y no lo más importante, el recuperar la conexión equipo-grada?

No tengo miedo, eso es lo que espero que pase. Espero que el equipo tenga claro que ganar no es lo mismo, sino de que la gente se tiene que ir de la Fonteta, o cuando juguemos lejos de ella, ha de ver los valores de máximo esfuerzo y compromiso, hasta donde lleguemos. Soy optimista, haremos un equipo equipo, pero en eso no podemos fallar, en nuestro día a día tiene que ser bueno, creo mucho en la mejora de los equipos, de los entrenadores, de los clubes. Que a final de temporada, todos hayamos crecido. Tenemos que ser capaces de hacer cosas que no sirvan para ganar el domingo pero sí para ser mejores individual- y colectivamente dentro de tres o cuatro meses. Eso es lo que nos dará resultados y recorrido. Claro, sin despreciar la competición, que todos estamos para obtener unos resultados muy dignos. Entrenamos muy bien y perdemos, no, tiene que haber un equilibrio. Pero soy optimista, sé que no es fácil tener un día a día bueno, competir cada día, no irse de los partidos, es fácil de decir, pero no de hacer. Nosotros tenemos que ser capaces de conseguirlo.

¿Cómo vive las expectativas? ¿Es un aliciente o un 8 mil que escalar?

Las expectativas del club son absolutamente motivantes y no me dan miedo, y estoy desde ya dispuesto a ayudar para las de la persona más exigente se cumplan. Todo mi esfuerzo y mentalidad para que la persona más ambiciosa del club, pero yo no puedo ser el responsable ni de los éxitos ni de los fracasos. Si tenemos éxito, será responsabilidad de todos, de muchos. Y si no salen bien las cosas, no será sólo mía, esto va de esto. Lo que tenemos que hacer es estar todos dispuestos a dar nuestra mejor versión y, si así no alcanza, hasta donde nos llegue. Me da igual si el club es muy ambicioso o no, porque estaremos en nuestro máximo. A lo mejor quedas cuarto y estás entu máximo, o primero y no.

¿En su cabeza, condiciona mucho a la hora de elaborar la próxima plantilla el no saber si se jugará Euroliga o Eurocup?

Claro que condiciona y no es ni fácil ni muy lógico. Vamos a quedarnos con lo que es seguro, jugar la liga ACB y la Copa del Rey, que dependerá de nuestra primera vuelta. Vamos a centrarnos en ser competitivos en ACB, la mejor liga de Europa, hoy y ahora. Si nos centramos en serlo, tenemos suficientes para poder trabajar.

¿Cómo se imagina su vuelta a la Fonteta?

Seguro que será muy emocionante, como cada vez que he vuelto estos años. Espero dar mi mejor versión para no defraudar a ninguno, aunque alguno en redes sociales me decía "estoy muy contento de que vuelvas pero te pitaremos". Es parte de la crítica y del camino, y los entrenadores tenemos que estar preparados para ello. No sabemos lo que pasará, lo único hacer muy bien lo que depende de nosotros.

Compatibilizar la ACB y la Euroliga es complicado, usted lo hizo en Baskonia, ¿cómo se puede conseguir?

No lo sé, creo que tendremos un buen equipo, por lo que he hablado con Luis y con Enric, pero hay una incertidumbre. ¿Cómo de competitivos? Aún faltan jugadores ni cómo será nuestro trabajo. Tenemos que hacer una buena pretemporada, acertar en los fichajes, que no sólo es una cuestión técnica y más de tener química de equipo, las lesiones, las expectativas que se generen... hay que tener mentalidad de ayudarnos los unos a los otros y crear una buena química. La química multiplica el rendimiento. Tendremos un buen grupo de jugadores, pero pediría tranquilidad cuando se anuncie un fichaje, la valoración cuando juegue. Pasa mucho y a veces afecta a los chavales. No podemos esperar que un equipo juegue muy bien a la jornada tres o cuatro. Hay que tener un poco de paciencia. En el esfuerzo, la mentalidad, la lucha, en estas cosas no se puede tener paciencia. Si desde el primer día eso falla, mal. Pero jugar bien requiere un tiempo. Lo otro, no.

Parece que desde que usted se fue se ha perdido un poco la conexión con la Fonteta...

Creo que cuando volví con Baskonia, ganamos, pero luego he perdido siempre... aquí regalar, nunca han regalado nada. De las últimas jornadas, Baskonia, Tenerife, Madrid... partidos fantásticos, de ritmo, de juego, de comunión con la grada, esto ha pasado este año... y puedo irme más para atrás, en los tiempos de Jaume Ponsarnau o Txus Vidorreta, parece como que en los últimos años aquí no se ha jugado a nada, esto no es verdad, aquí se ha hecho un buen baloncesto, grandes actuaciones, grandes jugadores o entrenadores. Esto no es un solar. Hay cambios y algunas cosas son diferentes, no va a haber un antes y un después. Mucho respeto por lo que se ha hecho hasta ahora aquí.

¿Le preocupa que la Fonteta empiece en octubre pensando en aquel equipo campeón de liga de 2017?

Creo que lo que pasó hace siete años pasó hace siete años. Parece absolutamente presuntuoso, injusto, pensar que parezca que yo gané la liga. Yo pasaba por aquí y estuve trabajando en un equipo magnífico, maravilloso, que tuvo éxito y antes alguna derrota importante.Yo sólo no gané la liga, vamos a poner en valor lo que pasó y estoy muy orgulloso de ser parte de aquel equipo exitoso, que superó el perder dos finales. Fui parte de aquel gran equipo y estoy muy orgulloso.

¿Ha hablado con Xavi Albert?

Todo mi respeto, lo ha hecho con muchísima dignidad. Ha hecho un gran trabajo que no se ha visto recompensado por los resultados. Hemos hablado antes, esta tarde tenemos una reunión luego una cena y tenemos los contactos telefónicos para trabajar en equipo, que es la única menra de tener éxito en la vida.