Debut soñado de Xavi Albert con triunfo y average contra Baskonia (111-101)

Cuando el viernes el Valencia Basket hizo oficial la destitución de Álex Mumbrú se buscaba una reacción de un equipo en descomposición, poner en el foco a los jugadores y destensar la relación grada-banquillo, que con el catalán era de alto voltaje.

La puesta en escena de Xavi Albert ante Baskonia fue una declaración de intenciones. Jones, López-Arostegui, Ojeleye, Pradilla y Davies. Talento mezclado con responsabilidad y compromiso. Había que aprovechar el viento favorable generado en la Fonteta y así fue. Parcial 7-0 de inicio con un mate de Pradilla, un tres contra uno a Kotsar, un manotazo a Moneke que le dejó sin gafas, un dos más uno de Ojeleye y una genialidad de Jones. En poco menos de dos minutos, esa había sido la tarjeta de presentación. Ivanovic frenó el partido, metió a Costello para tener más amenaza de fuera y abrir espacios, pero los taronja estaban duros, puestos, con fuego en los ojos, y generosos en ataque. Todos sumaban, todos. Todos mordían, todos. Solo cuatro canastas en juego permitidas en los 10 primeros minutos, dominio del rebote (10-3) y recuperaciones para un 31-14.

El segundo cuarto aún fue más solvente. Jones entró en trance y dio un recital anotador (20 puntos) pero también de gestor. Once de los doce jugadores con minutos anotaron. Solo Jovic se fue de vacío al descanso. Hasta Alpha Kaba firmó dos buenas acciones, una tremenda con un mate con la izquierda cazando un envío de Jones a las nubes. El descanso dejó todo encarrilado (62-34), pero ya sabemos cómo se las gasta este equipo.

El arranque del tercero fue otro mate de Pradillla, para un más 30, 64-34. Howard había anotado cinco puntos hasta este momento. Y empezó a entrar en combustión. Triple por aquí y por allá, con un repertorio descomunal. Pero los valencianos siempre encontraban respuesta. Ojeleye, Claver, Inglis en el poste o Jovic iban sosteniendo el colchón de la tranquilidad. 87-65, minuto 30.

Lo que no esperaba nadie es que Howard incendiara el partido y metiera intranquilidad en el cuerpo. Una exhibición de anotación que le llevó a poner el marcador en cinco puntos. 87-82. En ese momento de zozobra tres hombres se alternaron las tareas de salvamento. Davies, con un triple y una canasta tras rebote ofensivo. Eso fue un alivio, pero la revuelta la apagó con dos mates de abusón Justin Anderson.

Él puso en pie a la Fonteta y devolvió la química con la grada. Jones redondeó su gran actuación y ya solo faltaba un último detalle. El average. En Vitoria se había perdido de nueve. A pocos segundos, Davies recibió falta de tiro. Estaba fuera del arco. Tres tiros. Los tres dentro. Triunfo que vale por dos, con el average. Debut soñado de Xavi Albert.