VALENCIA BASKET
Valencia Basket gana la batalla de estilos al Tenerife y se va a dormir líder de la ACB (96-81)
Los valencianos, con la inspiración de Badio y el liderazgo de Puerto, se llevan un partido trabajado, en el que llegaron a estar diez puntos abajo en el marcador. El domingo en Murcia, ante UCAM, defenderán liderato liguero
Valencia - Publicado el
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No frena el Valencia Basket, sea como sea el escenario. Le planteó un partido lento el Tenerife, le costó adaptarse, pero resistió y acabó imponiendo su estilo veloz y frenético para ponerse en lo más alto de la clasificación de la Liga ACB. Un triunfo solvente. Con el mérito adicional de no haber podido contar a última hora con las bajas de De Larrea y López-Arostegui, que ampliaron la lista de lesionados que desde hace tiempo encabeza Happ y Reuvers. Pero lo dicho, no frenan los de Pedro Martínez, que siete años después, vuelven a liderar el campeonato.
Lo advirtió Pedro en la previa. Nadie iba a mandar siempre en el ritmo, sería una lucha por tratar de imponer el suyo cada uno el mayor número de minutos. Pues el primer mandón fue el equipo de Txus Vidorreta, con una buena defensa y mejor acierto (5 de 11 en triples), ralentizaban a los taronja. Ello llevó a los isleños a coger una ventaja que podría haber generado vértigo o esa angustia de la que también habló Pedro en los últimos días. Pero ni así, ni con un 17-27, minuto 12, y la sensación de que Marcelinho dominaba. Minuto local y reacción. Siete a cero de parcial con un triple de Pradilla, al que respondió de forma inmediata Sastre. Pero Valencia Basket había cogido ritmo y confianza, algo de lo que Puerto va sobrado en los últimos tiempos. Su buen tiro obligó al banquillo visitante a llamar a filas a los suyos. No hubo efecto. El torbellino se había desatado.
La primera ventaja en bastante tiempo fue gracias a Brimah, después de limpiar el aro, 34-32, minuto 17. El rebote, otra vez el rebote. Entre robos y rebotes, poco a poco Valencia Basket se iba haciendo con el control del ritmo. Montero, en dos chispazos, y Jovic, con un triple, cerraron la primera mitad con 42-38.
La vuelta fue definitiva. Mejor defensa, con robos y forzando malos pases, y triples. Badio hizo saltar la alarma de incendios, con su mano tirando fuego. Tres triples y un total de once de sus 21 puntos totales en este cuarto. Fuego puro. Un mate de Sestina, a pase de Montero, después de que Brimah limpiara el tablero, puso la Fonteta en pie. Sin darse cuenta, Tenerife se vio 68-52 en el minuto 18 con la explosión de liderazgo Puerto. El capitán, como siga así, va a obligar a Luis Arbalejo a sacar del congelador, antes de lo pensado, unas negociaciones que llevan ahí desde hace meses. Y con una cifra más alta también.
Otro rival se hubiera hundido o dejado ir. Tenerife, no. Marcelinho y Kramer castigaron algunas pérdidas y redujeron distancias. 68-62. Costello, qué listo es, dio aire. Aún se acercó otra vez y algo más el visitante. 81-76, con Vidorreta tirando también de rotaciones cortas, para equiparar energía. Pero Pedro Martínez devolvió a pista después de bastantes minutos sentado a Badio y su inspiración se mantuvo intacta. Más triples, más delirio en la Fonteta y faltaba el cierre de Puerto para volver, siete años después, a poner a Valencia Basket en lo más alto de la Liga. El domingo a Murcia, a defender ese privilegio.