El piloto Leh Keen ha acelerado el Porsche Taycan hasta 165 km/h en el interior de un centro de exposiciones

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Entre los récords mundiales Guinness existe un registro de la velocidad más alta de un vehículo en interior: hasta hace poco, era de 138,4 km / h. Las reglas, estrictamente aplicadas por Guinness World Records, intimidan a cualquiera. Keen tenía que empezar y terminar en parado su intento de récord, todo ello dentro del espacio del edificio. No podía ser en cuesta arriba, ni contar con una red de seguridad, ni puertas abiertas y, por tanto, ninguna vía de escape. Por ello, el anterior récord se ha mantenido imbatido durante siete años.

Ese muro se acercaba muy rápidamente.

No obstante, Keen continuó con entusiasmo su planificación. Necesitaba un coche en el que confiar para batir el récord: seguro en condiciones difíciles, con las mejores aceleraciones y, sobre todo, con la mejor frenada. El modelo que cumple esos criterios es el Taycan Turbo S, un modelo con tracción a las cuatro ruedas para maximizar el agarre, potentes frenos cerámicos de carbono y capacidad para acelerar hasta 100 km / h desde parado en solo 2,8 segundos.

Vídeo: https://youtu.be/6gozMJnzZhU

La selección del edificio adecuado fue también difícil. El elegido fue el Centro de Convenciones Ernest N. Morial de Nueva Orleans, Luisiana. Con más de 9 hectáreas, cuenta con el mayor espacio para exposiciones en Estados Unidos, ideal por la distancia que proporcionaba. Sin embargo, al igual que muchas otras instalaciones interiores, la superficie de hormigón pulido era como hielo cuando se pasaba por encima con velocidad.

La estrategia de Keen consistió en ir acelerando progresivamente, con tandas de prueba a baja velocidad. Los neumáticos de carretera de serie se precalentaron por precaución. Cuando llegó el momento de batir el récord, bastó con un intento. "Me tomé un momento en la línea de salida, sabiendo que iba a tener que ir lo más rápido posible y volver a parar, todo antes de llegar al muro que me esperaba al final y tenía toda mi atención. Utilicé el launch control y el Taycan simplemente se catapultó. La sensación de velocidad en el interior, incluso en un espacio tan grande, es enorme. Ese muro se acercaba muy rápidamente. Al final, los frenos del Taycan estaban más que a la altura.