Los valencianos gastarán una media de 25 euros en el disfraz y complementos en Halloween

Los valencianos gastarán este año un media de 25 euros en la adquisición del disfraz y los complementos para celebrar la fiesta de Halloween, y aprovecharán los artículos que tienen de años anteriores, ya sea para disfrazarse o para decorar la casa.

"La ciudadanía ha optado por hacer un uso responsable, sostenible, evitando además un desembolso económico", asegura este jueves la Unión de Consumidores de la Comunitat Valenciana, que ha elaborado un sondeo para conocer el presupuesto que tienen previsto destinar los ciudadanos a este evento.

La organización recomienda acudir a eventos seguros, que cumplan la normativa y en el caso de adquirir disfraces para los menores de 14 años, que se consideran juguetes, se debe comprobar que llevan la marca CE que garantice que los tejidos tienen una combustión lenta o advertir la existencia de piezas pequeñas o peligrosas que puedan ocasionar riesgo de asfixia.

El etiquetado debe estar en español y aportar información como la edad recomendada, las advertencias de utilización y los datos de identificación del fabricante o responsable del producto.

Los disfraces para adultos deben cumplir el etiquetado de las prendas textiles, indicando nombre, dirección y el NIF del fabricante, comerciante o importador, número de registro industrial en el caso de prendas fabricadas en España y composición del producto.

Vicente Inglada, secretario de la Unión de Consumidores de la Comunitat Valenciana, recomienda un consumo responsable y recuerda que siempre se pueden reutilizar disfraces o complementos de otros años y elaborar en casa el propio disfraz.

En el caso de los complementos, aconsejan prestar especial atención a las máscaras, ya que deben disponer de orificios suficientemente grandes para que garanticen la correcta ventilación, y evitar así la asfixia.

En cuanto a las pelucas, "debemos cuidar que estén elaboradas con materiales resistentes al fuego, como el nailon o el poliéster", indican desde la organización de consumidores.

También señalan que se debe "extremar la precaución" con el maquillaje, ante el riesgo de que estos productos no hayan sido sometidos a los controles dermatológicos adecuados, por lo que puedan producir alergias y recuerdan que su etiquetado no suele reflejar la composición y, en muchos casos, estas pinturas pueden contener plomo, una sustancia perjudicial para la piel y la salud.

En caso de usar dentaduras o cualquier otro objeto que se introduzca en la boca, se debe verificar que no contengan elementos químicos perjudiciales para la salud, pues muchos pueden llevar plomo, del cual ya hemos explicado su toxicidad. Además, las cápsulas con productos viscosos que simulan sangre tienen que estar perfectamente etiquetadas y sus ingredientes deben ser aptos para la salud.

Si se van a utilizar lentillas "debemos de tener en cuenta que estos accesorios solo deben adquirirse en un establecimiento de óptica y han de ser adaptados y supervisados por un óptico u optometrista", indica la organización, que añade que también hay que tener "cautela" con los pegamentos de ciertas pestañas postizas, pues pueden provocar irritaciones en ojos y piel.