No te pierdas la mejor Mocadorà de València

El Horno Pastelería Galán de Albal ha vuelto a brillar en el Concurso de Mocadorà, organizado por el Gremio de Panaderos y Pasteleros de Valencia, consolidando su prestigio con el primer premio en esta emblemática cita anual que ya cumple su 43ª edición. La calidad de sus frutitas de mazapán y la tradición artesanal han sido clave para que el jurado, una vez más, reconozca el esfuerzo y la excelencia de este histórico horno.

José, actual gerente de la pastelería, expresó su alegría: "Estamos contentísimos. Es un orgullo poder obtener otro primer premio, especialmente con la gran competencia que hay". Este horno, que cuenta con 52 años de trayectoria, sigue la receta original de mazapán creada por su padre. La clave de su éxito, según José, es un equilibrio perfecto entre un 65% de almendra marcona y un 35% de azúcar, que le da a sus frutitas ese sabor y textura inconfundibles.

El Horno Galán no solo se destaca por mantener las recetas tradicionales, sino también por innovar en las formas de sus frutitas, con una variedad de más de 35 tipos, entre ellas el higo, el coco y la sandía, todas elaboradas a mano. "Es artesanía pura", destacó José, que también reveló el arduo trabajo detrás de la producción de estas delicatessen: "Llevamos una semana entera haciendo frutas, elaborando cada pieza a mano, para garantizar su frescura y calidad".

El reconocimiento de este año consolida aún más la reputación del Horno Galán, que atrae a clientes de todas partes, incluso de fuera de la comarca, para llevarse las apreciadas frutitas de mazapán, tan características del Día de Sant Donís, conocido como el "Día de los enamorados valencianos".

José también habló sobre la importancia de mantener vivas estas tradiciones: "El pequeño comercio es lo que da vida a los pueblos y ciudades. Mantener la tradición de los hornos de barrio es esencial para nuestra identidad".

Con este nuevo galardón, el Horno Pastelería Galán sigue siendo un referente de la tradición repostera valenciana, ofreciendo no solo sabor, sino también la esencia de la cultura local, año tras año.