Vuelta al cole entre lágrimas y abrazos: el Rosa Serrano reabre tras seis meses de espera en Paiporta

COLE
Valencia - Publicado el - Actualizado
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Este martes ha sido un día especial para decenas de familias de Paiporta. Tras medio año de espera, por fin el colegio Rosa Serrano ha vuelto a abrir sus puertas, y lo ha hecho entre aplausos, abrazos y mucha emoción. “Es una victoria para todos”, asegura Elisa, una madre que reconoce que la espera “ha sido una lucha constante, porque el centro no tenía daños estructurales, solo hacía falta limpieza, carpintería o sustituir algunos electrodomésticos”.
Durante estos meses, las familias se han tenido que reorganizar como han podido: traslados a otros centros, desplazamientos en autobús, acogidas improvisadas. “Mi hija primero estuvo en Valencia, después volvió al pueblo porque lo que más querían era recuperar la normalidad con sus compañeros”, relata Elisa. Esa necesidad de rutina ha sido el motor para padres y madres, que no han dejado de reclamar una reapertura que se demoraba.

Instante de la entrevista a una de las madres en la entrada del colegio
Gloria, vicepresidenta del AMPA, reconoce que la experiencia ha sido tan traumática que su familia ha decidido no regresar a Paiporta: “Vendimos la vivienda y nos mudamos. No estamos emocionalmente preparados para volver a vivir algo así”. Aun así, ha seguido implicada en la reapertura del centro: “Lo he hecho por solidaridad y por agradecimiento al colegio que educó a mis hijas”.
La comunidad educativa, el AMPA y las donaciones privadas han sido clave. Con el apoyo de medios de comunicación y movilizaciones, se aceleraron los trabajos. “Teníamos dinero de donaciones y hasta quisimos pagar las pilas de la cocina para agilizarlo todo, pero ni eso nos dejaron. Finalmente se pusieron unas provisionales”, explican desde el AMPA.
Mireia, otra madre, celebra el reencuentro de sus dos hijos con sus amigos: “El pequeño no podía dormir de la emoción. Estar todos juntos otra vez era lo que más deseaban”.
Aunque solo quedan dos meses de curso, las familias coinciden en que lo importante ahora es recuperar el ambiente, cerrar el año con los compañeros y dejar atrás este capítulo. Como dice Elisa: “Hoy no hay ideologías, solo unión. Lo hemos conseguido entre todos”.