La Unión Extremadura se une a las protestas de los transportistas: "el campo también necesita reducir costes"

La organización agraria La Unión Extremadura ha anunciado este lunes que se suma a las protestas de los transportistas en la región y ha reclamado al Gobierno "diálogo y una bajada urgente" del precio del diésel y del gasóleo agrícola.

Así lo ha destacado el portavoz de La Unión Extremadura, Luis Cortés, en rueda de prensa, en la que ha enmarcado esta decisión de la organización en la "subida incontrolada de los costes de producción", que en la mayor parte de las ocasiones no se pueden repercutir en el servicio o en la producción obtenida por lo que "está provocando una pérdida de rentabilidad en las empresas y sobre todo en los autónomos".

A esto se suma, ha añadido Cortés, el actual precio del gasoil y del resto de 'inputs' de producción, que "están ocasionando la ruina de miles de autónomos ante la total indiferencia de los gobiernos, tanto a nivel estatal como regional".

Ante este panorama, ha avanzado que La Unión Extremadura ha acordado "unir sus fuerzas a la de miles de transportistas en la región para organizar actos de protestas conjuntos" con el objetivo de convencer al Gobierno para la "toma inmediata de acciones encaminadas a la reducción de los costes de producción", ha dicho.

Para el portavoz de La Unión, es "intolerable la falta de diálogo de las administraciones con las asociaciones convocantes de los paros", tras lo que ha lamentado que el calificar de minoritaria "a una representación de un sector en el que no ha habido elecciones no es una potestad que se pueda atribuir un Gobierno en una democracia", señala.

También Luis Cortés ha tachado de "intolerable" que "se recurra en vez del diálogo a las fuerzas de seguridad del Estado", así como que "se califique políticamente una protesta cuando la verdad es que el gasoil va a alcanzar los 2 euros el litro", según informa La Unión en nota de prensa.

En ese sentido, Cortés ha considerado que "la responsabilidad de los desabastecimientos de productos básicos no puede recaer en un sector que protesta por defender su puesto de trabajo", sino que a su juicio, la responsabilidad es de "un Gobierno que se niega a dialogar con estas asociaciones en la busca de un acuerdo para rentabilizar las pequeñas empresas", ha concluido.