Salir de Badajoz a las siete y veinte, llegar a Madrid despues de las dos

Sales de tu casa antes de las seis y media. Con sueño y con las calles todavía sin poner. En los auriculares del teléfono móvil Carlos Herrera cuenta como hoy es el primer día tras las vacaciones. Café y media de aceite en la Cantina. El tren saldrá a las 7 y 17. Vas con tiempo. Y es un Talgo. Tren Articulado Ligéro Goicoechea Oriol. La envidia del mundo tecnológico en tiempos. En Badajoz supuso la respuesta del Gobierno central a las incidencias constantes. Ya estás sentado. El tren va a salir. A las 12:30 horas estarás en Madrid. Si no sale nada mal. Si no se estropea nada.

Nueva incidencia en los trenes de la región. Una avería mecánica registrada ayer lunes en el tren Talgo que cubría la línea ferroviaria entre Badajoz y Madrid provocaba una demora de casi 100 minutos en el servicio. Los 70 viajeros (entre ellos el protagonista de nuestra historia) que,  a la misma hora, más o menos, en la que nosotros decimos "Bueno días" en nuestro informativo matinal, partían de la capital pacense con destino a Madrid llegaban a su destino a las dos y diez, por lo que su viaje duraba casi siete horas.

Siete horas de incertidumbre, siete horas de calor, siete horas de cansancio. El tren registró la avería técnica a la altura de Cañaveral, lo que generó una demora de 85 minutos. Una vez solventada, el convoy tuvo que detenerse otros 10 minutos en Oropesa para dar paso a otro tren por la vía en la que circulaba. Es otro de los regalos que ofrece la línea ferroviaria extremeña. Se trata de una línea única, no desdoblada como en otras zonas de España (casi todas), por lo que si un tren se retrasa por cualquier causa, encontrará otros convoyes en la vía, tanto en el sentido contrario, como, si son más lentos, en el mismo.