Le condenan a seis meses de multa por desobediencia al salir sin justificación varias veces en abril de 2020

La Policía le requirió en varias ocasiones que se abstuviera de hacerlo y más cuando su madre, con quien había estado residiendo, falleció por covid

seis meses de multa por desobediencia al salir sin justificación varias veces en abril de 2020

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Un juzgado cacereño ha condenado a un varón a seis meses de multa por un delito de desobediencia al salir sin justificación en "reiteradas ocasiones" en el mes de abril de 2020, durante el confinamiento, a pesar de la advertencia de los agentes.

Durante los meses de multa, el condenado tendrá que abonar una cuota diaria de cinco euros y, en caso de impago, tendrá una responsabilidad personal subsidiaria de un día de privación de libertad por cada dos cuotas diarias no satisfechas.

La sentencia, recogida por Europa Press y que es firme, considera como hechos probados que en abril de 2020 el acusado salió a la calle sin justificación suficiente en reiteradas ocasiones, a pesar de que los agentes de la Policía Nacional y de la Policía Local de Cáceres le requirieron para que se abstuviera de hacerlo, más cuando habría fallecido su madre, con quien había estado residiendo, contagiada por covid-19.

En concreto, el 10 de abril, en torno a las 10,39 caminaba por la Calle San Pedro sin justificación alguna, el 15 de abril fue sorprendido a las 08,00 horas en la Avenida de San Blas y a las 09,00 horas en la Calle Barrionuevo, también sin justificación.

Asimismo, el 16 de abril volvió a ser sorprendido en la Avenida de San Blas en dos ocasiones, también sin causa justificada, y el 23 de abril, alrededor de las 12,20 horas fue sorprendido en la Avenida de San Blas bebiendo una botella de cerveza con otras personas en un banco sin mantener la distancia de seguridad, haciendo ademán de marcharse cuando se lo indicaron los agentes.

No obstante, los agentes se lo volvieron a encontrar sentado en el banco unos minutos después, volviéndose a repetir la misma maniobra hasta que los efectivos lo acompañaron a su domicilio, indica la sentencia.

De igual forma, el 26 de abril fue sorprendido a las 09,00 horas en la Avenida de San Blas, explicando a los agentes que iba "a comprar como todos los días una botella de cerveza y que necesitaba andar".