TRIBUNALES
Piden 29 años para un hombre por matar a un hombre y herir a su hermano con una motosierra en Palomero
El juicio, con jurado popular, comienza el lunes en la Audiencia Provincial de Cáceres
Madrid - Publicado el - Actualizado
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El juicio contra el presunto autor del homicidio de un hombre y las heridas causadas al hermano de éste con una motosierra en la localidad cacereña de Palomero arranca el próximo lunes en la Audiencia Provincial de Cáceres con jurado popular.
La fiscal pide en su escrito de acusación para este hombre, Cornelio, un total de 29 años y medio de prisión, por un delito de homicidio (15 años), otro en grado de tentativa (9 años y seis meses), y un delito continuado de amenazas graves (5 años).
Asimismo, reclama el pago de una multa a razón de 12 euros diarios durante 24 meses, y una indemnización de más de 60.000 euros para la víctima por responsabilidad civil, tanto por las lesiones sufridas, como por la muerte de su hermano, ya que éste era su única familia, y por los daños causados en el olivar, donde el acusado fue sorprendido por ambos cortando olivos con la motosierra en venganza por los "numerosos" conflictos que mantenían entre ellos.
Motosierra que utilizó para dar muerte a Mauricio, de 60 años de edad, y provocando profundas heridas a su hermano Nicolás, de 50 años en aquel momento, de las cuáles tardó en recuperarse 158 días, seis de ellos ingresado en el hospital Virgen del Puerto de Plasencia.
Los hechos ocurrieron el 9 de octubre de 2020. Mauricio observó al acusado, Cornelio, conducir a gran velocidad en dirección a la finca de su hermano Nicolás. Entre ambos hermanos y el acusado había "numerosos" conflictos judiciales por temas relacionados con las fincas, habiendo sido denunciado el presunto homicida ya en varias ocasiones por los daños sufridos en los olivos de su propiedad.
Por este motivo, telefoneó a su hermano ante la sospecha de que el acusado se dirigiera nuevamente a la finca de éstos a provocar nuevos daños en sus olivos.
Ambos se dirigieron a la finca de Nicolás en el Paraje "El Guapero" donde observaron el todoterreno de Cornelio, con las llaves puestas, las cuáles fueron retiradas del contacto por uno de ellos para evitar que se marchara.
Ambos hermanos bajaron del vehículo escuchando el ruido de una motosierra mientras veían como el acusado cortaba los olivos de su propiedad, cogiendo del vehículo las varas que siempre portaban por su labor de ganaderos.
Bajaron por la finca hasta donde estaba Cornelio, cada uno por un lado, para de poder pillarle "con las manos en la masa" y obtener pruebas de que era el causante de los daños, ya que todas las denuncias que habían interpuesto contra él por hechos similares habían sido archivadas por falta de pruebas.
Nicolás llegó antes hasta Cornelio, ya que Mauricio camina más despacio por sus problemas de visión. Le dijo "te he pillado", tras lo cual el acusado se dirigió a él empuñando la motosierra sin dejar de accionarla en momento alguno y "sin mediar discusión alguna" acometió a Nicolás "con ánimo de acabar con su vida", provocándole cortes en diversas partes del cuerpo. Estas lesiones le provocaron una fuerte hemorragia que finalmente causaron su muerte a los pocos minutos de la agresión.
Acto seguido el acusado, empuñando la motosierra en alto y sin dejar de accionarla en momento alguno se dirigió a Mauricio "con la misma intención de acabar con su vida". Así, le acometió a la altura del pecho, no logrando alcanzarle diciéndole: "o te quitas de ahí o te hago lo mismo que a tu hermano".
En un segundo intento le alcanzó a la altura del pecho, quedando enganchada la cadena en la camiseta de Mauricio. El acusado, al haberse salido la cadena de la motosierra se dirigió a su vehículo, percatándose de que le habían quitado las llaves, guardando la motosierra en el maletero, cogiendo una sierra manual que llevaba y dirigiéndose nuevamente con ella al Mauricio diciéndole: "o me das las llaves o te hago lo mismo que a tu hermano", ante lo cual accedió Mauricio.
El acusado abandonó el lugar a gran velocidad, llegando a su domicilio donde se lavó y cambió de ropa tirándola a un contenedor, escondiendo la motosierra en la planta baja de su domicilio, en una caja de cartón.